El crítico de música analiza en su libro ‘Sempre a la contra i avant’ el éxito y la aportación a la cultura valenciana de la banda
VALÈNCIA, 3 (EUROPA PRESS)
El crítico musical Josep Vicent Frechina asegura que la música de Zoo ha conseguido “superar las fronteras lingüísticas” y “ha sabido llegar hasta donde la política no ha llegado nunca”: “Hemos podido vivir ese sentimiento de normalidad, de que nuestra lengua está a la altura de cualquier otra, de que se puede ir con ella como cualquier otro país homologable, que se puede hacer alta cultura en nuestra lengua y que tenga trascendencia fuera de casa”.
Así lo ha indicado Frechina en una entrevista concedida a Europa Press con motivo del lanzamiento de su nuevo libro ‘Sempre a la contra i avant’ (Sembra), en el que analiza el éxito y la trayectoria de la banda de Gandia a través de sus canciones.
El 7 de enero de 2024, la banda anunció su retirada de los escenarios. Fue a partir de este momento cuando el crítico de música empezó a pensar en que lo que había aportado este grupo al panorama cultural valenciano durante sus 10 años de trayectoria merecía “analizarse, pensarse y explicarse”.
Según el autor, el caso de Zoo supone “un fenómeno absolutamente excepcional” dentro del mundo de la cultura en la Comunitat debido a su “éxito y trascendencia” ya que considera que, “sea en el teatro, en el cine, en la literatura o en la música, (la cultura valenciana) normalmente tiene que pelear, no solo para poder trascender dentro de su propio territorio, sino para ir un poco más allá y traspasar las fronteras autonómicas y ocupar todo el territorio lingüístico”.
“Normalmente la cultura valenciana tiene muchos problemas para salir fuera de su ámbito y un fenómeno como el de Zoo, que había conseguido, no solo expandirse por todo el territorio lingüístico sino también superar las fronteras lingüísticas y actuar por todo el mundo, desde el comienzo, es absolutamente excepcional porque no es nada habitual que un grupo que canta en valenciano pueda tener ese seguimiento fuera del ámbito lingüístico”, ha destacado.
Para el crítico la trascendencia y el éxito del grupo responde a varias razones, entre ellas, que su irrupción dentro del panorama musical coincide con la necesidad de nuevos referentes por el vacío que habían dejado grupos como Aspencat o La Gossa Sorda –que en 2014 deciden poner fin a su trayectoria–, y contar con una fórmula musical que resulta “muy atractiva” para el público.
“SÍNTESIS” DE LO QUE FUERON OBRINT PAS O LA GOSSA SORDA
En este sentido, ha puesto en relieve la “autocrítica” que incorpora el grupo en sus canciones que “no solo son una consigna política” sino que incluyen “parte de las debilidades y contradicciones de cada uno” que hacen que sean “muy diferentes y especiales”. “Es un grupo que tiene contenido político pero muy diferente del resto de grupos que van a consigna o a panfleto. Ellos lo hacen desde una subjetividad que invita a la empatía”, ha incidido.
El periodista ha subrayado que Zoo supone para el panorama de la música en valenciano “una síntesis de todo lo que habían ofrecido grupos como Obrint Pas, La Gossa Sorda u Orxata”. “No era una reproducción, sino una optimización o un perfeccionamiento de esa propuesta y esa mezcla de fiesta y contenido político con un elemento muy subjetivo en las letras que genera mucha empatía”, ha enfatizado.
Asimismo, ha destacado el poder que tienen sus canciones para crear narrativas en las que aparecen elementos del imaginario valenciano que “se reformulan o se rearticulan de una manera diferente” y que revierten en el público a modo de aprendizaje o recuerdo. Como ocurre con ‘El cap per avall’, ‘La mestra’ o ‘Diània’ en las que se hace un retrato de la sociedad valenciana a partir de hechos históricos que marcaron al territorio.
Preguntado por la posibilidad de que otra formación recoja el testigo de Zoo, Frechina ha mostrado sus dudas ante esta posibilidad porque, según ha explicado, la aparición del grupo fue “suerte” y cree que es posible que “no haya ninguno, sino que sean varios grupos o propuestas diferentes las que consigan llenar ese vacío”.
“Hay ahora un talento extraordinario en la escena. Acaban de salir discos fabulosos como el de La Maria, por ejemplo, saldrá ahora el de Sandra Montfort o el de Esther. Hay realmente un relevo generacional importante, pero no necesariamente en la misma línea que Zoo y ocupando el mismo lugar”, ha indicado.
En esta línea, ha reconocido que, en el momento actual en el que se encuentra la lengua dentro de la Comunitat Valenciana, sería “muy necesario” que haya grupos que “arrastren al público, que sean cabeza de carteles de festivales y que puedan ser bandera de este movimiento de la música en valenciano más allá de las fronteras”. “Ojalá hubiera uno o dos grupos que pudieran tener el mismo efecto que ha tenido Zoo en la historia reciente”, ha expresado.
“PROCESO REGRESIVO DE LA CULTURA VALENCIANA”
A este respecto, ha señalado que la música de Zoo ha conseguido “hacernos vivir la utopía de un país normal, más justo y más solidario”. “En sus canciones y en los conciertos hemos podido vivir por momentos ese sentimiento de normalidad, de que nuestra lengua está a la altura de cualquier otra lengua, de que se puede ir con ella como cualquier otro país homologable, que se puede hacer alta cultura en nuestra lengua y que tenga trascendencia fuera de casa, que sea económicamente viable”, ha sostenido y ha añadido: “Ahí es donde han llegado las canciones de Zoo y la política no ha llegado a conseguirlo nunca”.
Así, interrogado por cuál cree que es la canción del grupo que mejor describiría el momento en el que se encuentra la sociedad valenciana, el crítico de música ha indicado que sería la de ‘Avant’ porque “nos ha tocado seguir a la contra y esa imagen de la palmera que el huracán hace doblar pero que no arranca, y está siempre ahí plantando cara, yo creo que es bastante representativa del momento que vivimos”.
“Estamos viviendo un proceso regresivo absoluto en el ámbito de la cultura valenciana y volvemos al momento en el que tiene que ser la sociedad civil, las entidades y las asociaciones las que tomen el volante otra vez de promoción y de defensa de la lengua y de la cultura. Y eso es bastante triste”, ha apuntado Frechina que considera “una cosa inaudita” que “desde las instituciones haya ese menosprecio absoluto” y “esa hostilidad hacia la lengua propia”.
A su juicio, la mejor forma para defenderse de ese ataque a la cultura y a la lengua es con “producciones de alta calidad” y “autogestión” como hace el Col·lectiu Ovidi Montllor (COM) desde hace 20 años. “Es una cuestión de producir alta calidad, de hacer alta cultura y de organizarse para crear un ecosistema donde se pueda promocionar, difundir entre la gente interesada y, al mismo tiempo, plantar cara a las instituciones y exigir que cumplan el papel que se supone que han de cumplir”, ha aseverado.
“La cultura es un valor estratégico en la sociedad actual y en cualquier sociedad avanzada, de cualquier país avanzado, tiene un papel preeminente. Y se ha demostrado que no es así. Se ha demostrado que las actuales instituciones, el actual gobierno de la Generalitat, le dan la espalda a la cultura de manera rotunda, absoluta y descarada y tenemos que exigirles que cambien eso”, ha concluido.
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