ALICANTE, 13 (EUROPA PRESS)
La Sociedad de Ginecología y Obstetricia calcula que, en España, entre el 10 y el 15 por ciento de las mujeres sufre endometriosis y se tarda siete años de media en diagnosticar esta enfermedad. Por ello, la doctora Alicia Esparza, del Hospital Vithas Medimar, ha abogado por “sospechar” de esta enfermedad cuando una paciente acude a la consulta con dolor en la menstruación o dolor pélvico crónico, aunque “la ecografía pélvica sea totalmente normal”, lo que servirá para “mejorar la calidad de vida” de las pacientes.
La doctora ha destacado que existen otros síntomas “menos específicos” que pueden hacer pensar en esta enfermedad, como el dolor en las relaciones sexuales, el dolor en la micción o en la defecación, según ha indicado Vithas en un comunicado.
La especialista ha señalado que no se puede establecer un perfil concreto que pueda derivar en endometriosis, aunque ha precisado que sí que se han estudiado diferentes factores que pueden estar relacionados con la aparición de esta enfermedad, como son una menstruación retrógrada, la metaplasia celular –algunas células fuera del útero se transforman en células similares al endometrio– y la proliferación celular –las células endometriales emigran fuera del útero–. A ellos se suman otros factores como los genéticos y ambientales.
La ginecóloga ha apuntado que, actualmente, “no hay ninguna forma de prevenir la endometriosis”. No obstante, ha añadido que es posible “mejorar los conocimientos para diagnosticar de forma precoz la enfermedad”. De esta forma, es posible “enlentecer el curso natural de la enfermedad, mejorar la sintomatología y la calidad de vida de la paciente”.
“El tratamiento dependerá de la sintomatología de la paciente y de si presenta algún tipo de lesión secundaria a la endometriosis, como adherencias o también quistes ováricos llamados endometriomas”, ha precisado. Así, puede ser un tratamiento médico con antiinflamatorios o anticonceptivos, u otro quirúrgico mediante laparoscopia o laparotomía.
La doctora Esparza ha detallado que hay estudios que relacionan la endometriosis con otro tipo de enfermedades, como alergias, asma, hipotiroidismo, fibromialgia y el síndrome de la fatiga crónica. La evolución de la endometriosis varía en cada paciente, en función de si se ha realizado o no un diagnóstico precoz, ya que ha indicado que, “en algunos casos, se normalizan y estigmatizan los síntomas, por lo que no se llega a diagnosticar”.
“Si no se realiza un diagnóstico, esto puede dar lugar a una disminución de calidad de vida de la paciente, a nivel general por el dolor crónico, fatiga, ansiedad y depresión entre otros síntomas. También a nivel sexual por el dolor durante la relaciones sexuales y reproductivo por la infertilidad secundaria a la endometriosis”, ha resaltado.
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