VALÈNCIA, 11 (EUROPA PRESS)
El Festival Bucles encara este fin de semana la recta final de su edición “más comprometida” con los estrenos de dos propuestas valencianas de danza contemporánea en Riba-roja de Túria y Alboraia (Valencia): ‘Titán’ y ‘Antoñita’.
Este viernes, Riba-roja de Túria acoge la propuesta de Adrián Ros ‘Titán’. Un espectáculo participativo en el que se manifiesta una práctica que pone la mirada en la Tierra y en nuestra sociedad: después de atravesar por diferentes realidades, se pregunta si hay alguna experiencia vital alternativa a la nuestra, y si esa alternativa sería mejor. Será gratuita en el auditorio de la localidad, a las 20.00 horas, según ha explicado la organización en un comunicado.
El domingo será el turno para el proyecto inclusivo ‘Antoñita’, de Irene de la Rosa. Se trata de una investigación artística que se sumerge en la vida y obra de La Singla para descubrir cómo su condición de sordera y su género influenciaron su expresión y posicionamiento dentro del flamenco.
Este estudio no busca homenajear de manera tradicional, sino abrir un diálogo crítico sobre los límites y posibilidades del cuerpo, la percepción y el género en el arte del flamenco. Será en el Teatre L’Agricola Alboraia, a las 19.00 horas.
Estas dos propuestas están integradas dentro del programa de residencias artísticas ‘Teixint Municipis’ que lleva a cabo el Festival. Es un programa generado para fomentar la creación artística del sector de la danza en distintos municipios de la provincia de Valencia, creando una red de residencias artísticas que se dirige a propiciar intercambios entre artistas, contenedores culturales, tejido ciudadano y agentes sociales y culturales de los distintos entornos donde se realizan las residencias.
El festival llega a su fin tras una “exitosa” edición en la que se han presentado más de 35 propuestas artísticas, 24 compañías y colectivos de danza valencianas, siete propuestas nacionales y cinco internacionales.
Los espectáculos, distribuidos en diversos espacios no convencionales de València y sus alrededores, han permitido que la danza se acerque a un público más amplio y diverso. “Esta edición no solo ha destacado por su variedad creativa, sino que también ha cumplido con el objetivo de hacer la danza accesible a nuevos espectadores, logrando una notable proyección cultural más inclusiva”, ha destacado el festival.
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