VALÈNCIA, 19 (EUROPA PRESS)
El Consell Valencià de Cultura (CVC) se suma a la conmemoración del Día Mundial del Circo, que se celebra cada año el tercer sábado de abril, y reivindica la necesidad de dotar de mayor visibilidad a este arte “universal, vivo y en constante transformación” y de dotar a sus artistas de unas condiciones dignas.
“Por encima de todo, este día es una oportunidad de reconocer la función social del circo, de disfrutar de la belleza y la mirada amable, una mirada que nos muestra la fragilidad y la esperanza que hay detrás de cada gesto humano. El circo nos descubre esta humanidad en estado puro”, reivindica.
En su declaración, el CVC destaca que la Comunitat Valenciana es un territorio donde el circo y las artes escénicas de calle disfrutan de una implantación muy significativa, con “muchas compañías y profesionales que trabajan para conseguir abrirse espacio en un horizonte inestable y siempre incierto”.
Por eso ve fundamental impulsar la proyección de las compañías valencianas en el ámbito autonómico, estatal e internacional: “Este año, el Día Mundial del Circo es una oportunidad para homenajear las mujeres y los hombres que cada día se comprometen con un oficio que requiere muchos años de especialización y que demasiado a menudo proporciona desarrollos profesionales más bien breves”.
Paralelamente, la institución lamenta “la escasa visibilidad que sufre el mundo del circo” y defiende la necesidad de prestigiarlo y aumentar su presencia en los medios de comunicación públicos.
Otras de sus peticiones son agilizar los procesos burocráticos para acceder a ayudas, favorecer la estabilización de escuelas y compañías, fijar y cumplir los calendarios de convocatorias y consolidar y ampliar los circuitos valencianos de exhibición.
“La atención que las diversas administraciones otorgan al circo es muy exigua”, señala el CVC. En 2005, el Europarlamento instó a los estados de la UE a reconocer el circo como elemento de la cultura de Europa. En España se puso en marcha un proceso para la elaboración de un plan general del circo en 2011 y, once años después, un convenio para la organización del circuito Circo a Escena, prorrogado a finales de 2023.
No obstante, hay “cuestiones pendientes” como el reconocimiento de la actividad, más contratación en espacios públicos o la regulación de la formación circense, que “después de una larga reivindicación ha quedado fuera de la de Ley de Enseñanzas Artísticas Superiores”.
“El circo, asociado a una vida itinerante, mezcla entre tradición y modernidad, mestizaje de etnias y culturas, ha sido sinónimo de convivencia, de solidaridad. El circo hace patente la necesidad humana de los otros; de la inclusión de las diferencias, del equilibrio entre el que es real y el universo de los sueños. Nos conecta con el goce y también con la parte más vulnerable de nosotros mismos. El circo nos habla también de precariedad, de la necesidad de condiciones dignas para las personas que trabajan, de la indispensable implementación del Estatuto del Artista y las personas trabajadoras de la cultura, de la equiparación entre hombres y mujeres. ¡Muchos éxitos y larga vida al circo!”, concluye la institución.
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