VALÈNCIA, 25 (EUROPA PRESS)
Los dos grupos de la oposición en el Ayuntamiento de València, Compromís y PSPV, temen que los cambios en las líneas de autobús de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de la ciudad afecten a la peatonalización del centro y, en concreto, de la plaza del Ayuntamiento impulsada por estas dos formaciones en el anterior mandato.
La alcaldesa, María José Catalá, y el edil de Movilidad, Jesús Carbonell, han dado a conocer este miércoles la reestructuración de algunos recorridos de la EMT, con la que se modifican siete líneas de autobús para “ampliar las conexiones directas” con el centro de la ciudad. Además, se abre un carril bus de la calle Colón al tráfico general y se conecta el frente marítimo con las estaciones de tren de Joaquín Sorolla y Estación del Norte a fin de “impulsar el turismo”. Los cambios afectan a las líneas 4, 11, 16, 26, 32, 70 y 31.
“Hoy es un día terrible porque de cumplirse la amenaza anunciada por Catalá y su equipo, asistimos a la destrucción de una de las mejoras más celebradas por los valencianos en las últimas décadas, la pacificación y peatonalización del centro de València con la única finalidad de cumplir la promesa/ocurrencia de María José Catalá de devolver el tráfico privado a la calle Colón”, ha señalado el edil de Compromís Giuseppe Grezzi.
El concejal ha apuntado que “el descontrol existente en las áreas de EMT y Movilidad” se va “a traducir en el destrozo de todos los avances realizados en los últimos años y en la vuelta de los atascos y la congestión en el centro”.
Asimismo, ha criticado la “incoherencia de la alcaldesa”. “Cuando peatonalizamos la plaza del Ayuntamiento pedía que no hubiera ni un carril para autobuses en ella y ahora añade el paso de no menos de 600 autobuses al día a los que ya circulan”, ha expuesto, a la vez que ha considerado que ese enclave “volverá a funcionar como estación de autobuses, al volver a regular en ella dos líneas”.
Grezzi ha manifestado que la modificación anunciada “también pone fin al avance en la peatonalización del tramo de San Vicente Mártir entre la Plaza de la Reina y la Plaza del Ayuntamiento”. Ha declarado que los cambios supondrán “un incremento inequívoco de la circulación de vehículos en el centro –5 líneas más por San Vicente Mártir, las mismas que ya pasan por Poeta Querol, y menos transporte público pero muchísimo más privado por Colón–“.
“El anuncio de Catalá no ha venido acompañado de ningún informe técnico que avale que las medidas vayan a bajar el tráfico, porque van a tener precisamente el efecto contrario”, ha añadido Giussepe Grezzi, que ha aseverado que evidencia también que “la preocupación” de la alcaldesa “por los BIC era falsa” porque “no ha reducido el paso de autobuses por Poeta Querol y en cambio suma el paso de más de 600 junto a la fachada de la Real Parroquia de San Martín Obispo y San Antonio Abad”.
Compromís ha censurado además “el deterioro del funcionamiento del servicio que ofrecerá la EMT de consumarse los cambios”. “Dudamos que alguien de la EMT haya podido dar el visto bueno técnico a esta modificación de líneas que lo que hará será incrementar los tiempos de viaje y de frecuencia de las líneas de autobús de los barrios de València”, ha apostillado.
“Hoy Catalá, desmintiendo a aquellos que decían que daba igual votar a unos que a otros porque lo que estaba bien hecho no se iba a cambiar, ha anunciado que devolverá a València al tráfico de los 80”, ha resaltado Grezzi, que ha asegurado que “Compromís seguirá dando la batalla para impedirlo”.
“POR QUÉ ES MEJOR”
Desde el PSPV-PSOE, su portavoz, Sandra Gómez, ha instado a Catalá a explicar si la modificación de las líneas de la EMT anunciada “va a poner en riesgo la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento que había diseñado el anterior gobierno de la mano de los socialistas”. Igualmente, ha pedido a la primera edil que “justifique por qué es mejor que los autobuses municipales pasen por la calle San Vicente que por Poeta Querol cuando soporta una media de 2.000 vehículos diarios más”.
“La remodelación de las líneas que ha anunciado el PP supone que una buena parte del transporte público que hasta ahora circulaba por la calle Colón dejará de hacerlo para seguir el trazado de la calle San Vicente, evitando el paso de los autobuses por la calle Poeta Querol”, ha apuntado Gómez.
“Desde el Partido Socialista nos preguntamos por qué es mejor que los autobuses pasen por la calle San Vicente –donde ya pasan en la actualidad 2.000 vehículos más al día que por Poeta Querol, ha precisado– ya que es una calle estrecha donde las vibraciones, el ruido y la contaminación pueden tener un mayor impacto”, ha manifestado.
La representante del PSPV-PSOE ha afirmado que “desde que Catalá llegó al Ayuntamiento ha priorizado al vehículo privado sobre el transporte público y ha descartado diferentes proyectos de peatonalización y renaturalización de avenidas como Pérez Galdós, San Agustín y la avenida del Oeste o el Corredor Verde porque su proyecto de movilidad pivota alrededor del coche y la contaminación”.
“Por eso, nos preguntamos si tras esta modificación de líneas va a esconder un retroceso en la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento”, ha agregado.
TARJETA SUMA EN LUGAR DE BONOBÚS
Por otra parte, la edil socialista María Pérez ha criticado que el PP vaya a aprobar esta tarde en el consejo de administración de la EMT las tarifas para 2024 “en las que mantiene el Bonobús a pesar de que la tarjeta metropolitana Suma, que presta el mismo servicio, es más barata”.
“Desde el PSOE pensamos que es el momento de apostar por la tarjeta Suma, por una tarjeta metropolitana que permite viajar en autobús, pero también en otros modos de transporte y además a un precio inferior”, ha dicho Pérez.
La concejala ha avanzado que propondrá en esa reunión que “el único título a la venta para poder viajar en la EMT sea la tarjeta Suma”, dado que “disponer de dos títulos que ofrecen el mismo servicio” lleva a “confundir a los ciudadanos” y a que “algunos viajen a un precio más elevado con Bonobús que con la tarjeta Suma”.
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