VALÈNCIA, 28 (EUROPA PRESS)
El director de la Agencia Valenciana Antifraude, Joan Llinares, ha reprochado la actitud “beligerante y ofensiva” del Ayuntamiento de Benidorm por intentar “amedrentar” a cinco funcionarios del organismo con una querella tras acudir a las instalaciones municipales a solicitar información para una investigación.
Así lo ha indicado Llinares en su comparecencia de prensa tras presentar la memoria de 2022 de la entidad, en la que se señala al consistorio de la ciudad alicantina como uno de los ayuntamientos que más incumplen las recomendaciones de la agencia, y se recogen varias investigaciones sobre irregularidades en procesos de selección.
En concreto, Llinares ha lamentado que el alcalde interpusiera una querella contra los funcionarios por falsedad en el acta y usurpación de funciones “ignorando absolutamente” que la ley fundacional de la Agencia da a sus funcionarios consideración de autoridad pública. Por ello, considera que la intención tras la denuncia era “amedrentar” a los trabajadores.
Así, tras acusar al consistorio de Benidorm de “poner enm marcha todo el mecanismo legal para perseguir a los funcionarios” de la agencia, ha manifestado: “Si esto hacen contra los funcionarios que tienen toda la protección legal, qué no harán contra los que trabajan dentro de su administración”.
En concreto, en la memoria se recoge como el alcalde, Toni Pérez, interpuso una querella contra los funcionarios relacionada con los hechos ocurridos el 12 de mayo de 2021. Aquel día, los funcionarios de la agencia comparecieron en dependencias del Ayuntamiento de Benidorm acompañados de dos agentes de Policía Nacional y solicitaron entrevistarse con el alcalde, a lo que este accedió.
La reunión, según se explica en la memoria, tuvo lugar en su despacho junto al secretario, y se produjo un requerimiento personal de documentación e información, de lo que se extendió la correspondiente acta, existiendo algunas discrepancias en cuanto al contenido de lo que se consignó en la misma.
Dicha visita se produjo en el ámbito de un expediente de investigación incoado para determinar presuntas irregularidades relacionadas con la situación en que se encentraban diversos hoteles sitos en Benidorm sin la preceptiva licencia municipal, en cuyo curso se dirigieron requerimientos de documentación e información al Ayuntamiento de Benidorm y a su alcalde, que no fueron atendidos y provocaron la comparecencia de los funcionarios de la Agencia.
Como consecuencia de discrepancias derivadas de aquella comparecencia el alcalde presentó querella en los juzgados de Benidorm. En dichas diligencias también se personaría el Ayuntamiento de Benidorm, y ello con amparo exclusivamente en un Decreto de la propia Alcaldía de fecha 3 de junio de 2021.
Para la agencia, la acción penal iniciada por el alcalde, y seguida e impulsada por el propio Ayuntamiento de Benidorm, “se encontraba huérfana de todo sentido y razón, mereciendo significarse que la misma no perseguía la defensa de intereses públicos”. De ahí que Llinares ha insistido en la intención de “amedrentar” que consideraba que tenía.
Tanto la querella como el posterior recurso fueron desestimados al estimar los magistrados que no se daban los delitos de los que se acusaba a los funcionarios, explica la memoria.
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