MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
Un agente de movilidad de Madrid acusado de falsificar un parte de denuncia para multar al supuesto amante de su expareja ha negado los delitos que se le imputan y se ha reafirmado en el juicio en que la tarde de los hechos dio los datos que vio de la matrícula del coche infractor.
La Fiscalía de Madrid solicita tres años y medio de prisión para Rafael G. por un delito de falsificación en documento oficial. El encausado se ha negado a pactar con la fiscal al estar en contra de los hechos que se le imputan.
En su declaración, el acusado ha relatado que en el momento de los hechos, la tarde del 27 de noviembre de 2022, estaba ejerciendo sus labores en la Plaza de la Independencia, relatando cómo se produjo la infracción denunciada.
“Leo la matrícula y paso los datos a la emisora, que comprueba que el coche tiene ITV y seguro en vigor. Ese es un Skoda Octavia. Compruebo con mi vista lo que dice la emisora”, ha detallado.
A preguntas de la fiscal sobre por qué dio unos datos de un coche que estaba en Alcalá de Henares, ha insistido en que vio “ese vehículo en Madrid y no en Alcalá de Henares”. “No tengo ningún problema con ese muchacho y no ha habido motivo de animadversión”, ha recalcado.
En la vista, ha comparecido el instructor policial del atestado, quien ha detallado que el procedimiento parte de una denuncia del propietario del coche después de que le llegaran dos multas.
El dueño, que reside en Alcalá de Henares, denunció que la tarde del 27 de noviembre de 2022 no estuvo en Madrid y trasladó a los agentes sus sospechas hacia la entonces pareja de una compañera de trabajo que era agente de Movilidad de Madrid.
“Piensa que le pudo multar por represalias y relata un episodio en el que el acusado se para delante de su taller y se ríe de él”, ha detallado. La Policía comprobó con las cámaras de seguridad de la Plaza de la Independencia que el vehículo multado no había pasado esa tarde por la zona.
Por su parte, Alberto D. P. ha relatado que nunca tuvo problemas con el acusado. Según su relato, recibió dos multas de tráfico por una infracción de tráfico cometida en la citada plaza de la capital pero esa tarde estaba en Alcalá tomando algo con un compañero y su prima hasta las ocho de la tarde.
“¿De dónde le surgen las sospechas hacia el procesado?”, le ha preguntado la fiscal, a lo que éste ha respondido que “sabía que era agente de movilidad” y fue a hacer una reclamación. “Yo nunca tuve relación con su pareja”, ha subrayado. Al parecer, al testigo le llegó que gente del pueblo del procesado comentaban que eran amantes.
El agente que acompañaba al procesado durante el día de los hechos ha relatado que cuando se comete una infracción de tráfico se incorporan los datos en una PDA como la matrícula, el modelo y el lugar de la infracción.
“Vemos a un conductor que lleva un teléfono en la mano y saco mi PDA para denunciar. Cuando mi sorpresa fue que el conductor no paró en el semáforo y no había visualización. Se me ha ido, se me ha ido y dice apunta, apunta. Y me da unos datos”, ha relatado.
HECHOS JUZGADOS
Según se desprende del escrito, el 27 de noviembre de 2022, sobre las 19:30 horas, R. S. G., agente de movilidad de Madrid, se encontraba ejerciendo sus funciones de regulación del tráfico en la Plaza de la Independencia en compañía de J. G, F., también agente de movilidad.
En un momento dado, J. G. F. observó cómo un conductor que circulaba haciendo uso de un teléfono móvil se saltó un semáforo en fase roja, por lo que solicitó al acusado que le facilitara los datos del vehículo, dado que por la rapidez a la que se habían producido los hechos no había sido capaz de anotarla en su dispositivo PDA para tramitar la oportuna denuncia.
Entonces, R. S. G. facilitó a su compañero los datos de marca, modelo y matrícula del coche de otra persona “de quien creía que mantenía una relación sentimental con la que había sido su pareja”, motivo por el cual J. G. F. A. formuló sendas denuncias por las infracciones de tráfico observadas “haciendo constar los anteriores datos”.
Las anteriores denuncias han dado lugar a los correspondientes expedientes sancionadores del Ayuntamiento de Madrid, habiendo recurrido la persona afectada las sanciones que le fueron impuestas.
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