MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
Más de 500 personas se han congregado la tarde de este viernes en el distrito madrileño de Usera en recuerdo de Carlos Palomino, el joven que fue asesinado hace 15 años en un vagón del suburbano madrileño tras ser apuñalado por un militar ultraderechista.
La marcha ha comenzado en la plaza Julián Marías, en Usera, a las 19.00 horas y ha finalizado a las 22.30 horas en la plaza Beata Mariana Jesús, según ha informado un portavoz de la Policía Municipal a Europa Press.
‘Carlos Vive, la lucha sigue’ y ‘Madrid será la tumba del fascismo’ han sido algunas consignas que se han escuchado durante la protesta, en la que también se han visto varias bengalas por parte de algunos de los concentrados recordando a Palomino como un símbolo del movimiento antifascista.
El recorrido ha estado supervisado por efectivos de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y por agentes de la Policía de Madrid.
El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha publicado un mensaje en redes sociales recordando que hace 15 años Carlos Palomino murió “a manos de un neonazi”. “Carlos, hermano, nosotros no olvidamos”.
En la misma línea se ha pronunciado la secretaria general de Podemos, Ione Belarra. “15 años del asesinato de Carlos Palomino a manos del fascismo. No olvidamos”, ha publicado junto a una foto de la multitudinaria manifestación.
ASESINATO DE CARLOS PALOMINO
Todo ocurrió el 11 de noviembre de 2007 cuando J. Estébanez, de 24 años, se dirigió en Metro a la estación de Usera, para asistir a la manifestación del partido ultraderechista Democracia Nacional. Al llegar a Legazpi, observó que en el andén se encontraba un grupo de cien jóvenes, que identificó como antifascistas que iba a boicotear la manifestación de Democracia Nacional.
Antes de que el tren se detuviese, sacó una navaja que ocultó esperando a que entrasen en el vagón algunos de los citados jóvenes para agredir a cualquiera de ellos con el menor pretexto por su enfrentada divergencia de pensamiento.
Entre los jóvenes se encontraba Palomino, de 16 años, quien al acceder al vagón y percatarse de que la estética del joven se correspondía con la de un skin neonazi, le preguntó sobre su sudadera en la que visiblemente figuraba: ‘Three-Stroke’, marca que habitualmente usan personas de dicha ideología, a la vez que se la tocaba.
De repente, el acusado le asestó una fuerte puñalada en el tórax, entre el tercer y cuarto espacio intercostal izquierdo, con trayectoria de arriba-abajo, que penetró unos siete centímetros alcanzando el ventrículo izquierdo del corazón, y que le produjo la muerte poco después por un shock hipovolémico.
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