Le desea “mejor suerte y más aciertos” que en la política madrileña y se muestra preocupado de que Sanidad quede “en manos de la ultraizquierda”
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local de la Comunidad de Madrid, Miguel Ángel García Martín, ha sumado a la recién nombrada ministra de Sanidad y hasta hoy portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García, a la lista de líderes “de la izquierda radical” que “salen huyendo” del parlamento autonómico ante la “solidez” del Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso.
Tras conocerse el nombramiento de García, con el que se venía especulando desde hace semanas, el portavoz del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha unido el nombre de la nueva ministra a los del exvicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias, la coportavoz de Podemos Isa Serra o el diputado de Sumar en el Congreso Íñigo Errejón, los cuales se han visto, a su juicio, “impotentes” ante “la solidez” de la presidenta del Gobierno regional, Isabel Díaz Ayuso.
“Lo que no cambia con la formación del nuevo Gobierno: Una vez más los líderes de la izquierda radical salen huyendo de la Asamblea de Madrid, impotentes ante la solidez de la presidenta Isabel Díaz Ayuso y de su Gobierno”, ha publicado en sus redes sociales el consejero de Presidencia, quien ha advertido de que el nuevo Ejecutivo “seguirá siendo un derroche de recursos” con 22 ministerios.
“Tras Iglesias, Errejón o Serra, ahora sale huyendo de Madrid Mónica García”, ha añadido García Martín en una segunda publicación en la que le ha deseado a la nueva titular de Sanidad “mejor suerte y más aciertos” en el Ministerio “que los que ha tenido en la política madrileña”.
Para terminar, Miguel Ángel García Martín ha sentenciado que “lo más preocupante” de este anuncio es que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “deja en manos de la ultraizquierda la Sanidad”, en la línea de lo expresado por la consejera madrileña del ramo, Fátima Matute, durante un desayuno sociosanitario organizado por Europa Press en el que ha afirmado que “es una desgracia que la Sanidad quede en manos de la ultraizquierda”.
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