MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Los forenses del juicio contra el joven que mató en mayo de 2023 a su compañero de piso en el barrio de Puerta del Ángel han certificado el ensañamiento en su conducta al acometer más lesiones de las mortales de necesidad y le han descrito como un psicópata por su falta de empatía, sin que el trastorno de personalidad que sufre afecte a su capacidad de distinguir entre el bien y el mal.
La víctima era un joven rapero de origen colombiano de 29 años y procedente de Algeciras. Tras el crimen, sus amigos le rindieron un homenaje con un mural en el centro de la capital. ‘Eterno Eugenio’, rezaba la obra pintada en el barrio de Malasaña.
En su declaración, el acusado reconoció el pasado lunes su autoría sin recordar detalles de cómo lo hizo y alegó que sufre un alteración psíquica que, según su defensa, le eximiría de responsabilidad penal.
En la pericial, los expertos han ratificado los informes de autopsia y de levantamiento del cadáver, indicando que de las treintena de puñaladas que le asestó, solo tres eran mortales. Entre ellas, figura la que le seccionó la yugular; la que le perforó el pulmón; y el golpe que le provocó una brecha en la cabeza que se produjo con un monopatín, que se halló en el piso ensangrentado.
En la pericial psicológica, las peritos ha indicado que el agresor tenía capacidades cognitivas y volitivas para entender lo que hacía, confirmando el trastorno de conducta disocial que padece con rasgos psicopáticos. Así, las especialistas han tachado al acusado de psicópata por su falta de empatía y por interpretar de forma errónea el entorno.
La fiscal solicita una pena de 22 años de cárcel por un delito de asesinato. Frente a ello, la defensa reclama la libre absolución al considerar que concurre una eximente completa por anomalía psicológica y de forma subsidiaria se solicita que ingrese en un centro psiquiátrico.
PERDÓN A LA FAMILIA
En su declaración, el joven explicó que no recuerda haber cogido un cuchillo, apuntando que salió con “las manos ensangrentadas” y empezó a “anda y andar”. Tras ello, ha dicho que la víctima era buena persona y ha pedido perdón a la familia. “No puede expresar la culpa”, dijo.
Según el fiscal, el día 16 de mayo hacia las 15:30 horas, el acusado, F. J. O. R., quien se hallaba en el domicilio que compartía con E. L. P. P., le asestó, con un arma blanca dotada de una hoja de escasa longitud y una anchura de, al menos, 15 milímetros, treinta y seis puñaladas.
Así, fue apuñalado en el rostro, el cuello, el hombro izquierdo, la cara anterior del hemitórax izquierdo, la cara posterior del hemitórax derecho, la fosa lumbar derecha, la pierna derecha, el brazo izquierdo, ambos antebrazos y ambas manos.
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