Pese a su apuesta por el turista de alto impacto, no renuncia al turismo familiar de clase media: “Sigue siendo un destino asequible”
MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
La Comunidad de Madrid ha visto reducir el número de viviendas turísticas registradas en alrededor de 3.000 durante los últimos cinco años y actualmente tiene registradas más de 13.000, de las cuales una inmensa mayoría se ubica en la capital.
Así se ha señalado durante un encuentro informativo en el que ha participado el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Mariano de Paco Serrano, para hacer balance de su primer año de legislatura, en el que ha recordado el anuncio realizado en junio en los Desayunos Madrid de Europa Press de incremento de efectivos para el control de estas viviendas, así como el endurecimiento de las sanciones, la mejora de la colaboración con los ayuntamientos y la reforma de la Ley de Ordenación Turística.
De Paco ha vuelto a apostar por la “regulación” y la “ordenación” de estas viviendas sobre la “prohibición”, en “coherencia”, ha señalado, con la doctrina de la Unión Europea. Asimismo, ha recordado que este sector, el de las viviendas de uso turístico, es “Legal” y “genera empleo, economía e industria”.
Frente a esto, ha lamentado la apuesta del Gobierno de España, de manos de la ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, por “prohibir e intervenir”, pero “no legislar”. En este sentido, se ha mostrado “sorprendido” por el “silencio” del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, sobre esta cuestión.
En este primer año de Legislatura, la Comunidad de Madrid ha duplicado los efectivos encargados del control de las viviendas de uso turístico, con 13 nuevos –que se unen al actual equipo de 16– y a los que se añadirán otras cuatro personas para la recopilación e intercambio de datos.
“Uno de los grandes retos de la política turística es dar respuesta satisfactoria a la convivencia en ámbitos como estas viviendas”, ha remarcado De Paco Serrano, que ha recordado el endurecimiento de las sanciones en caso de desobediencia o falsedad para aquellos supuestos en los que se establezca la baja de la actividad, así como el refuerzo de los sistemas de colaboración e intercambio de información con los municipios.
14,5 MILLONES DE TURISTAS EN 2023
Mariano de Paco se ha felicitado por los datos de afluencia turística en la Comunidad de Madrid, con 14,5 millones de turistas en 2023, 7,8 de ellos internacionales, y que desembolsaron 16.675 millones de euros.
Este sector crea ya el 7% del empleo, con alrededor de 255.000 afiliados a la Seguridad Social. De Paco Serrano ha subrayado que el objetivo del Ejecutivo autonómico es seguir fomentando la llegada de visitantes de América y Asia, y avanzando en la diversificación de la demanda y el crecimiento del tiempo de estancia media.
Con este fin, la Consejería ha emprendido viajes a lugares como Ciudad de México, Bogotá y Miami. Para esta misma tarea se han creado productos como las rutas de las galerías de arte, la de la moda de autor español y por las 14 ganaderías de toros; el turismo de agua; los destinos rurales; las guías de establecimientos hosteleros con solera y de ocio nocturno, así como la apuesta por los campos de golf o los tablaos flamencos.
Respecto al turismo procedente de Asia, desde la Consejería se subraya que junto con la recuperación de los vuelos a China, Corea y Japón tras el parón de la pandemia o la nueva conexión de Iberia con Doha (Catar), se ha producido un cambio de tendencia en este grupo de turistas, que ahora llega en grupos más pequeños para realizar estancias “más largas” que las tradicionales de turismos, lo que implica un gasto “superior” de estos turistas.
Precisamente, el consejero ha defendido que junto con la apuesta de Madrid por atraer a un turista de alto impacto que alargue su estancia y extienda su gasto –con los mismos viajeros que en 2019, en 2023 el gasto fue un 27,5% superior–, la Comunidad “no abandona” su apuesta por el turismo familiar de clase media y ha defendido que dentro de la “oferta amplísima” de la región, Madrid “sigue siendo un destino asequible” para el turista, a diferencia de lo que ocurre con otras capitales europeas como París, Londres o Roma.
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