LEGANÉS, 14 (EUROPA PRESS)
El Partido Socialista de Leganés ha renunciado finalmente a su propuesta de armar una moción de censura para desalojar al PP y Unión por Leganés (ULEG) del Gobierno local, una iniciativa que anunció ayer su portavoz, Javier Márquez, y que necesitaba obligatoriamente del apoyo de los concejales de Vox.
La formación ha anunciado en redes su renuncia mediante un breve comunicado: “El PSOE de Leganés no va a presentar ninguna moción de censura, ni va a intentar formar gobierno de ninguna de las maneras con Vox”, esgrimía el mensaje en redes sociales.
Posteriormente, en un comunicado ha asegurado que “las cuatro formaciones que conforman la oposición de Leganés pueden coincidir a la hora de analizar la nefasta política de este Gobierno local, pero eso, solo eso”. “Nunca, en ningún momento, PSOE y VOX tendrán nada más en común que su tajante oposición a un incapaz Gobierno local”, sentencian los socialistas.
Tras ello, la formación ha asegurado que sus “ideas, totalmente contrarias a las de VOX, impiden ir de la mano de la extrema derecha para lograr objetivo alguno”. “Nuestro partido está en las antípodas de VOX, algo que no ocurre con el resto de formaciones de izquierdas de la ciudad, con las que mantenemos una continua y estrecha relación”, mantiene.
El anuncio de Javier Márquez en un programa radiofónico este jueves contrarió a parte de la Agrupación local, que habría maniobrado para impedir una propuesta que chocaría con los “planteamientos del partido en la región y en la Federal”.
Mientras, fuentes del Gobierno local de Leganés se han preguntado si la propuesta “individualizada y contraviniendo los principios del PSOE” habilita a Javier Márquez para seguir siendo portavoz de su Grupo.
Desde el PP leganense, entretanto, se ha apuntado a la “tragedia” que supone actualmente el Partido Socialista en la localidad. “Si el PSOE de Leganés no fuera una tragedia para los vecinos, resultaría hasta cómico”, han apostillado en redes sociales.
EL ANUNCIO
Márquez anunció este jueves que su formación iniciaba conversaciones con el resto de portavoces para armar una moción de censura, un paso estratégico que requiere del apoyo de Vox para ser registrado y votado. Solo los votos de los ocho ediles del PSOE, los dos de Vox, los tres de Más Madrid y los dos de Podemos-IU habrían posibilitado que la moción prosperase.
“Voy a llamar a los diferentes portavoces de los grupos políticos para plantearles hacer una moción de censura”, anunciaba el socialista, que insistía en que “el alcalde, Miguel Ángel Recuenco, y su apéndice, Carlos Delgado, tienen que irse ya”. “Que nos dejen gobernar, que nos dejen sacar a esta ciudad de donde está. No se ha hecho nada en dos años”, criticó.
Tras conocerse el anuncio, el portavoz de ULEG y concejal de Obras, Carlos Delgado, preguntaba si “el PSOE va a unir sus votos con Vox”. “¿Lo sabe esto Pedro Sánchez? ¿Lo sabe Óscar López, secretario general de PSOE-M? ¿Santiago Abascal va a autorizar que los votos de Vox sirvan para aupar a un alcalde o alcaldesa del PSOE?”, esgrimió en un vídeo difundido en redes.
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