Insiste en que “absolutamente nadie” cobró comisiones cuando estaba en Presidencia
BARCELONA, 23 (EUROPA PRESS)
El exsecretario general de la Presidencia de la Generalitat con Jordi Pujol entre 1980 y 1990, Lluís Prenafeta, ha asegurado que pondría las dos manos en el fuego a que Pujol “no se ha metido nunca un duro en el bolsillo”, mientras que por Jordi Pujol Ferrusola quizás pondría un dedo, ha dicho.
En una entrevista en ‘El Suplement’ de Catalunya Ràdio recogida este sábado por Europa Press, ha destacado que Jordi Pujol es una de las tres únicas personas que ha admirado en su vida –junto a Winston Churchill y Josep Pla– y que lo hace porque le enseñó a “amar” Catalunya.
Preguntado por el pacto al que llegó con la Fiscalía en el que reconoció haber defraudado 15 millones y cobrado comisiones, ha asegurado que él quería “firmar el acuerdo y ya está: Me dijeron, usted diga esto, porque la justicia va de esta manera”.
Ha insistido en que mientras él fue secretario general de la Presidencia “nunca nadie, absolutamente nadie, puede decir que desde Presidencia y sobre todo desde la Secretaría General se cobrara ninguna comisión”.
Ha añadido que él no fue condenado por comisiones ilegales, sino por no “tributar en su momento”, y al preguntársele textualmente por si cree que él es víctima de una persecución judicial, ha respondido que más perseguido ha sido Jordi Pujol.
SIN CONFRONTACIÓN “NO HAY INDEPENDENCIA”
Preguntado por la independencia, ha criticado la manera en la que se intenta alcanzarla porque considera que “sin confrontación con el Gobierno o con el Estado, no hay independencia”.
Ha reprochado que los políticos que han gobernado en Catalunya “no han sabido con quien se enfrentaban, no saben lo que es España”, una crítica que ha extendido a los líderes del 1-O y a los dirigentes de la política catalana actual.
Prenafeta ha recordado que Jordi Pujol le avisó: “A España no le pongamos los dedos en la boca, que muerden, ¿eh?”.
Ha dicho que no está nada seguro de que haya un acuerdo que permita investir al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ni una ley de amnistía, por las “posiciones diferenciadas” entre PSOE y Junts, y porque no cree que Sánchez ceda a las exigencias, ha dicho, del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.
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