Ubasart valora que el nuevo edificio “ejemplifica la apuesta por el medio abierto”
TARRAGONA, 2 (EUROPA PRESS)
La consellera de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat, Gemma Ubasart, ha inaugurado este jueves el Centre Obert de Tarragona, al que se trasladarán 39 presos en libertad condicional y 132 en régimen abierto en la provincia.
El departamento ha explicado en un comunicado este jueves que entre los reos que se trasladarán al nuevo edificio hay cinco mujeres, y ha recordado que los internos en semilibertad duermen en el centro de lunes a viernes, donde salen entre semana para trabajar o formarse, y el fin de semana pueden ir a sus casas.
El nuevo edificio tiene una superficie construida de 6.120,40 metros cuadrados, empezó a edificarse en enero de 2020 y ha supuesto una inversión de 14 millones de euros.
Es el primer centro penitenciario abierto mixto de Catalunya y cuenta con una unidad para jóvenes, sumando 68 habitaciones dobles y cinco individuales accesibles para silla de ruedas, con un total de 141 camas que, de ser necesario, pueden ampliarse hasta 219 convirtiendo las habitaciones dobles en triples.
El edificio cuenta con “unas instalaciones tecnológicas de alto nivel” que permitirán usar datos biométricos y tarjetas identificativas para los internos para circular por el centro.
“UN ESPACIO AMABLE”
El departamento ha destacado que “es el primer equipamiento penitenciario que se construye expresamente como centro abierto, ya que el resto son edificios construidos inicialmente como centros penitenciarios ordinarios” y después rehabilitados para acoger a presos en tercer grado.
Esto implica que “es el primer centro abierto con un diseño ambiental normalizador, sin elementos de seguridad propios de un centro cerrado” como muros y rejas, y para la Conselleria responde a la visión más residencial del cumplimiento de la pena en tercer grado.
“Se trata de un espacio amable, en contraposición al antiguo centro penitenciario de Tarragona, que hasta ahora ejercía de centro abierto. Aquella edificación fue construida en los años 50 y sus instalaciones no eran adecuadas para el objetivo final de la reinserción”, ha valorado la consellera Ubasart en el acto de inauguración.
26% DE PRESOS EN TERCER GRADO
El 26% de presos en Catalunya están clasificados en tercer grado, y Ubasart se ha marcado como objetivo que dentro de cuatro años supongan el 30%, para lo que “también es importante la complicidad de actores del mundo jurídico y judicial”.
La consellera ha destacado que “aproximadamente el 30% de la población reclusa es reincidente, vuelve a delinquir, pero este porcentaje baja al 20% entre los clasificados en régimen abierto”.
Ubasart ha equiparado la política penitenciaria a la política social y la apuesta por el medio abierto a una política de seguridad: “Este es nuestro modelo, un modelo que pasa por hacer más permeables las fronteras entre la sociedad y los centros penitenciarios, por decrecer el régimen de internamiento. Un modelo que concibe la política penitenciaria como política eficaz de seguridad y de cohesión social”.
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