Señala el aumento de la brecha económica y el cambio climático como principales retos
BARCELONA, 27 (EUROPA PRESS)
El secretario general de la Unión por el Mediterráneo (UpM), Nasser Kamel, ha manifestado este lunes que espera que el alto el fuego en Gaza allane el camino “para un proceso de reconstrucción y reconciliación muy necesario, que conduzca a una paz integral basada, por supuesto en la solución de dos estados”.
Lo ha explicado en su intervención durante la inauguración de la jornada ‘Hacia el relanzamiento de la política euromediterránea. 30 años del Proceso de Barcelona’ que se celebra en el Parlament, donde ha celebrado la entrada en vigor del acuerdo de alto el fuego en la zona.
De hecho, ha deseado que el alto el fuego ponga fin “a 15 meses de violencia devastadora y a la profunda tragedia humana actual que tiene efectos en cadena en toda la región y más allá”.
Y es que, según Kamel, el conflicto es un epicentro de tensión que ha evidenciado “una vez más la fragilidad de la paz y la seguridad” en la región, por lo que ha pedido revivir la esperanza que, en su opinión, generó el denominado Proceso de Barcelona hace 30 años para buscar una solución a dicha guerra.
“Se ha demostrado que la estabilidad de la región es crucial para la seguridad global, y que cualquier conflicto dentro o alrededor de ella inevitablemente tiene un enorme impacto en todo el mundo”, ha subrayado.
DESAFÍOS
Pese a reivindicar que en la zona mediterránea viven más de 500 millones personas y que representan una cuarta parte de todo el comercio marítimo internacional, ha anotado que también son “un punto crítico de muchos desafíos que plantean riesgos de múltiples niveles para la paz, seguridad y la estabilidad” de la zona.
Así, ha señalado la ampliación de la brecha económica entre los países del norte y sur de la zona y la emergencia climática como dos de los principales desafíos que afronta la región.
Según Kamel, los vecinos del sur de la UE afrontan “duros desafíos económicos, desde un alto desempleo hasta un desarrollo desigual y vulnerabilidad en crisis externas”, y ha añadido que el cambio climático está comportando un aumento de la temperatura y presiones ambientales que, a su juicio, exigen una acción regional urgente.
Aunque considera que ha habido avances en materia de integración económica y energía, ha lamentado que el progreso ha sido “lento y sigue estando muy por debajo del potencial de la región euromediterránea en términos de capacidades y recursos”.
“Deberíamos preguntarnos si en realidad hemos hecho lo suficiente para empoderar a los marcos regionales y multilaterales para abordar esos desafíos comunes en los últimos 30 años”, ha apuntado.
Para Kamel, es momento de unirse y de forjar un nuevo camino porque la próxima década representa una oportunidad fundamental para que la región euromediterránea afronte riesgos complejos y detenga la tendencia hacia una mayor inestabilidad a fin de garantizar un futuro resiliente, sostenible e inclusivo”.
Por ello, ha llamado a reforzar el diálogo y los lazos regionales para poder afrontar los retos más apremiantes de forma conjunta y contribuir con ello “a restaurar la estabilidad y el orden global”.
REFORZAR LA UpM
También ha asegurado que la UpM está dispuesta a contribuir en este esfuerzo, y por ello ha destacado la importancia de que la entidad se refuerce para fortalecer su capacidad de acción, un proceso que están llevan a cabo desde 2023 y que seguirán implementado este año.
Además de reivindicar que la creación de una cartera para el Mediterráneo demuestra que la región ocupa “un lugar destacado en la agenda estratégica de la UE”, ha explicado que el jueves, tras reunirse con el nuevo comisario, regresó esperanzado en que podrán trabajar para fortalecer la relación y cooperación con Europa.
En la jornada inaugural también ha participado el presidente ejecutivo del Institut Europeu de la Mediterrània (IEMed), Senén Florensa; el presidente del Consell Català del Movimento Europeu, Jordi Xuclà, y el presidente de la Cámara catalana, Josep Rull.
- Te recomendamos -
