Los comuns y la CUP critican la falta de acuerdo sobre las dietas de los diputados
BARCELONA, 21 (EUROPA PRESS)
El Parlament ha aprobado este miércoles su Presupuesto para 2023, que suma un total de 66.956.190,39 euros y supone un incremento del 2,13% respecto al ejercicio anterior, con los votos a favor de PSC y ERC, la abstención de Junts, Cs y PP, y el voto en contra de la CUP, los comuns y Vox.
El pleno ha avalado así las cuentas que aprobó la Mesa ampliada el pasado 29 de septiembre, donde Junts votó a favor y Vox se abstuvo –el resto de fuerzas votaron lo mismo que han votado este miércoles en el pleno–.
El presupuesto de este año sigue sin resolver una de las polémicas de los últimos años en el Parlament: las indemnizaciones por desplazamiento o dietas que cobran los diputados, que no están sujetas a IRPF y, por lo tanto, no tributan en el total de su retribución.
El año pasado se planteó una posible reforma para que las dietas se incorporaran al salario y quedaran sujetas al IRPF, aunque asumiendo el gravamen el Parlament para que no supusiera ninguna modificación al alza ni a la baja de la remuneración total de los diputados.
Sin embargo, y, ante la falta de acuerdo para impulsar esta reforma, el presupuesto para 2023 establece que una parte de las dietas pase al salario de los diputados –que sí que tributa–, en cumplimiento del Reglamento, que llama a reducir progresivamente estas indemnizaciones para que pasen a la asignación fija; en 2023, esa parte será el equivalente a una mensualidad.
SUBEN LOS COSTES
El incremento del 2,13% en las cuentas obedece, entre otras causas, al crecimiento de salarios de trabajadores de la Cámara, que suben un 2%, y del coste de suministros de electricidad y gas, con un aumento de 400.000 euros; también se renovarán equipos, se harán reformas en el edificio del Parlament y se destinarán 25.000 euros a prácticas remuneradas para universitarios.
La vicepresidenta segunda del Parlament, Assumpta Escarp (PSC), ha destacado ante el pleno que este año los presupuestos de la Cámara catalana se han elaborado siguiendo objetivos de desarrollo sostenible (ODS) sobre igualdad de género, cambio climático y transformación digital.
Según ha explicado, las cuentas incluyen un análisis de la brecha salarial en el Parlament, “negativa en casi todos los grupos”, pero que ha detectado que el 100% de las reducciones de jornadas recaen sobre mujeres.
El presupuesto del Parlament para 2023 se inscribe en la tendencia al alza de las cuentas desde 2019, tras un periodo de contención del gasto entre 2011 y 2018 después de alcanzar un gasto récord en 2008.
CGE, SINDICATURA Y SÍNDIC
El pleno del Parlament de este miércoles también ha aprobado las cuentas del Consell de Garanties Estatutàries (3.459.391 euros), la Sindicatura de Comptes (13.683.154,51) y el Síndic de Greuges (7.159.935,76 euros) para 2023.
Todas ellas serán remitidas junto a las de la Cámara al Govern con el fin de que las incorpore a los Presupuestos de la Generalitat para 2023, que el Ejecutivo de ERC sigue negociando con Junts y PSC tras cerrar un acuerdo con los comuns.
DESACUERDO POR LAS DIETAS
En el turno de intervenciones, la diputada de los comuns Susanna Segovia ha urgido a los grupos a llegar a un acuerdo sobre las dietas de cara al año que viene para poner fin al “privilegio” que, a su juicio, mantienen estos presupuestos respecto a las dietas, que defiende someter a tributación.
Con ella ha coincidido la diputada de la CUP Eulàlia Reguant, que ha criticado que los grupos hayan llegado a acuerdos para regularizar situaciones que afectaban a los empleados de la Cámara pero miren “para otro lado cuando el escándalo afecta a los bolsillos de los diputados”.
Desde Junts, Jordi Munell ha lamentado que las cuentas hayan buscado “pasar página” sobre la reforma de las dietas que planteó en su momento la presidenta suspendida de la Cámara, Laura Borràs, y ha afeado que no incluyan el incremento adicional del 1,5% sobre sueldos decretado por el Estado.
“Sorprende el cambio de rumbo y posicionamiento político de algunas formaciones”, ha dicho Raquel Sans (ERC), que ha recordado que Junts votó a favor del presupuesto en la Mesa ampliada y se ha abierto a continuar estudiando cómo regularizar las dietas.
El socialista Òscar Ordeig también ha apoyado seguir explorando un posible acuerdo, pero ha advertido de que los grupos que han votado en contra de los Presupuestos tampoco tienen una propuesta que sume un “consenso mayoritario”.
Por parte de Vox, Joan Garriga ha defendido reducir la aportación a los grupos parlamentarios de 12 a 6 millones para ofrecer “un gesto a la ciudadanía de que sus impuestos no se malgastan en caprichos políticos”, y eliminar el Consell de Garanties Estatutàries, la Sindicatura de Comptes y el Síndic de Greuges.
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