Fue denunciado por primera vez en 2022 y estuvo dos años en prisión preventiva
BARCELONA, 6 (EUROPA PRESS)
Los Mossos d’Esquadra detuvieron el jueves pasado a un hombre de 27 años por presuntamente agredir sexualmente durante horas a una mujer que mantuvo retenida en una barraca en Manresa (Barcelona).
Según ha avanzado ‘El País’ y han confirmado fuentes de la policía catalana a Europa Press, los hechos sucedieron el 12 de enero en los aledaños de una discoteca de la localidad en donde el hombre se acercó a la víctima, que iba acompañada por un amigo, haciéndose pasar por policía.
Tras entablar conversa únicamente con la mujer, el amigo se marchó y el investigado engañó a la mujer y la condujo a una zona boscosa en donde supuestamente atacó sexualmente a la mujer en una barraca abandonada durante horas.
El aviso se dio después que la víctima consiguiera huir de la caseta y los Mossos acabaron detuviendo al sospechoso dos semanas después de los hechos en Terrassa (Barcelona).
El hombre, que tenía antecedentes policiales por violencia sexual y a quien se le acusa de un delito de agresión sexual y detención ilegal, ya ha pasado a disposición judicial y ha entrado en prisión.
TRES AGRESIONES SEXUALES
El hombre –que no tiene antecedentes penales porque está pendiente de juicio– fue denunciado por primera vez en septiembre de 2022, pero quedó en libertad dado que la víctima no presentaba lesiones y sólo había un testimonio, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJC) a Europa Press.
Un mes después se presentó otra denuncia y la víctima en este segundo caso lo reconoció y aportó unos pantalones con semen que presuntamente pertenecía al denunciado, motivo por el que ingresó en prisión provisional durante dos años.
Sin embargo, las mismas voces han indicado que en la vista para decidir una prórroga de la prisión provisional hubo una novedad importante: el semen analizado no se correspondía con el ADN del sospechoso, por lo que quedó en libertad al decaer la prueba más objetiva.
No obstante, se le impusieron medidas cauterales: orden de alejamiento de la víctima, retirada de pasaporte, prohibición de salir del país y comparecencias semanales en los juzgados.
Desde finales de octubre de 2024 y hasta el 13 de enero de este año cumplió con estas medidas, según ha confirmado el TSJC, pero ni el 13 de enero ni a la semana siguiente se presentó a firmar en el juzgado, por lo que la Audiencia de Barcelona ordenó su detención e ingreso en prisión.
La orden de búsqueda se emitió el 29 de enero, coincidiendo con que se le busca ya por la presunta agresión sexual del 12 de enero en Manresa.
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