Recrea su despacho en el exilio y expone la urna donde se guardó el corazón de Macià
BARCELONA, 23 (EUROPA PRESS)
Una exposición en la sede de la Diputación de Barcelona se adentra en la historia del Archivo Montserrat Tarradellas i Macià e incluye una recreación del despacho de Josep Tarradellas en el exilio con los archivadores originales y la urna que custodió el corazón galvanizado del presidente Francesc Macià durante más de 40 años.
La muestra ‘Els fonaments de l’autogovern’, comisariada por el historiador Joan Esculies, explica cómo se constituyó el archivo e incluye también magnetófonos que Tarradellas usaba para grabar, cuadernos, facsímiles de documentos y fotografías, ha explicado este jueves el comisario.
El archivo, custodiado por la comunidad cistercense del monasterio de Poblet (Tarragona) y punto ineludible para historiadores de la II República, la guerra civil española, el exilio y la Transición, acoge más de dos millones de páginas de documentación y el grueso de documentación que lo conforma llegó a Catalunya en agosto de 1981 procedente de Tours (Francia).
Tarradellas escribió y recibió miles de cartas, de las que en su fondo han permanecido 140.000, 93.000 de la época del exilio, y las escribía a mano o a máquina, junto a su secretario, Lluís Gausachs, y también dictaba la letra en un cassete, que el secretario se encargaba de pasar a máquina con papel y sello de la Generalitat.
El archivo de Tarradellas conserva un fondo notable de documentos que permiten reseguir la vida institucional de la Generalitat, y la exposición refleja el camino de la documentación que se quiso conservar tras el avance de las tropas franquistas y que se trasladó a Francia, donde Tarradellas se instaló en Saint-Martin-le-Beau junto a sus padre.
La exposición explica cómo el padre del político, Salvador Tarradellas, escondió la documentación en sacos dentro de bidones de gasolina y la escondió en un bosque cercano a la finca durante la ocupación nazi, con lo que los papeles de la Generalitat, el propio Tarradellas y ERC estuvo bajo tierra tres inviernos.
La documentación se desenterró y se llevó a la propiedad de Tarradellas, donde el político la instaló en unos grandes archivadores, y tras ser nombrado elegido presidente de la Generalitat en el exilio, el archivo fue creciendo.
Tras su retorno a Catalunya, Tarradellas optó por depositar la documentación en Poblet, por su “voluntad de continuidad” con las tumbas reales de la Corona de Aragón y de presidentes de la Generalitat medieval, ha explicado Esculies.
CORAZÓN DE MACIÀ
La exposición también explica el viaje del corazón del presidente Francesc Macià y de la urna que custodió el órgano, después de que a su muerte su círculo próximo decidiera extraérselo para preservarlo en una urna con formol y galvanizarlo.
Sin embargo, el proceso de galvanizado no se completó nunca y el corazón quedó en una caja fuerte del Palau de la Generalitat, desde donde partió al exilio en 1939 y Tarradellas lo dejó en una caja fuerte de la entidad Société Générale de Tours, donde en 1965 advirtieron que salía un líquido extraño.
Tras el retorno de Tarradellas a Catalunya, se hizo un acto de entrega del órgano a la hija del presidente, que lo depositó en el panteón donde reposaban los restos de Macià.
- Te recomendamos -
