BARCELONA, 27 (EUROPA PRESS)
Un hombre ha aceptado una condena a una multa de 1.440 euros por un delito contra el patrimonio histórico al reconocer que desenterró y se llevó dos llaves, tres fragmentos de hierro y un trozo de cerámica del yacimiento arqueólogico de la Villa Romana de Sant Amanç, en Rajadell (Barcelona).
Ha confesado que recorrió el yacimiento con una pala y dos detectores de metales, y que para encontrar los objetos cavó en nueve puntos distintos, según consta en la sentencia consultada por Europa Press este miércoles.
El Juzgado Penal 1 de Manresa (Barcelona) añade en la sentencia que, si se hubieran retirado correctamente, las piezas se podrían haber documentado y utilizado para determinar la importancia del uso del hierro en la época romana.
Sin embargo la mayor parte de su valor histórico “se ha perdido de forma irreparable, al haberse separado de su contexto arqueológico”.
El juez agrega que el valor de las piezas es testimonial, de unos 25 euros, y en cambio “el perjuicio de esa pérdida de información es incalculable”, y la Generalitat calcula que la intervención para evitar que los agujeros que cavó el hombre dañen las construcciones que hay en el subsuelo costará unos 2.000 euros.
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