Los agentes intervinieron 12 plantaciones que consumían el equivalente a 174 viviendas de uso familiar
BARCELONA, 3 (EUROPA PRESS)
Los Mossos d’Esquadra desmantelaron una factoría de marihuana que presuntamente gestionaban dos clanes familiares especializados en tráfico de drogas en El Prat de Llobregat (Barcelona), y detuvieron a seis personas –cinco hombres y una mujer–.
En un comunicado este miércoles, la policía catalana ha explicado que la investigación se inició en noviembre, cuando los agentes tuvieron conocimiento de que dos grupos criminales presuntamente habían instalado de nuevo plantaciones de marihuana en cuatro pisos de un mismo edificio donde anteriormente se había actuado policialmente.
El 26 de abril, agentes de los Mossos d’Esquadra y de la Policía Local del municipio realizaron 16 entradas y registros bajo la tutela del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 3 en funciones de guardia de El Prat de Llobregat.
12 PLANTACIONES DE MARIHUANA
Los agentes intervinieron 12 plantaciones con un total de 2.700 plantas de marihuana en distintos estados de crecimiento y, el 27 de abril, encontraron 3.500 plantas más de otras personas de los presuntos grupos criminales que las habían abandonado en contenedores “por miedo a más registros”.
En total se detuvo a cinco hombres y a una mujer –además de otra mujer que quedó investigada– como presuntos autores de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas y un delito de defraudación de fluido eléctrico.
Tras pasar a disposición judicial, los detenidos –que acumulan entre todos 57 antecedentes policiales– quedaron en libertad con cargos, aunque la investigación sigue abierta y no se descartan más detenciones.
INHABILITACIÓN DE LOS PISOS
El Ayuntamiento de la localidad ha decretado la inhabilitación de los pisos para “impedir que se vuelvan a dedicar a la producción ‘indoor’ de marihuana”.
La comisión técnica del departamento municipal valoró la inhabilitación de las viviendas por el “riesgo evidente de incendio por las conexiones fraudulentas que alimentaban las plantaciones de cannabis que ocupaban total o parcialmente estos pisos, en la mayoría de los cuales nadie vivía”.
Los técnicos de la compañía suministradora de energía eléctrica calcularon que la defraudación de fluido eléctrico es de 212.000 euros aproximadamente en el último año, y que entre las 12 plantaciones consumían el equivalente a 174 viviendas de uso familiar.
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