Rechaza una propuesta para eliminar la exigencia del C2 de catalán a docentes
BARCELONA, 19 (EUROPA PRESS)
La consellera de Educación de la Generalitat, Anna Simó, ha entregado al Consell Escolar de Catalunya (CEC) el proyecto de decreto de régimen lingüístico del sistema educativo catalán, que pretende “defender el modelo de escuela catalana y de cohesión social y de igualdad de oportunidades”, para que lo evalúe.
Lo ha dicho este jueves, junto al presidente del Consell Escolar de Catalunya, Jesús Vinyes, antes de asistir al plenario de este organismo.
Este proyecto, que forma parte del plan de fomento de la lengua catalana en centros educativos que se desarrollará hasta 2028, se ha sometido a información pública desde el mes de julio hasta este septiembre.
El decreto pretende “proporcionar seguridad jurídica a docentes y las direcciones de los centros educativos a la hora de garantizar la enseñanza de lenguas”; criterios pedagógicos para alcanzar las mismas competencias en catalán, castellano y lengua extranjera al final de la educación; y fortalecer el modelo lingüístico.
También prevé exigir el nivel C2 de catalán a los docentes que accedan al sistema a partir del curso 2025-2026, y aportará recursos para el alumnado recién llegado, “porque refuerza la igualdad de oportunidades”.
Durante el periodo información pública se han recibido un total de 112 aportaciones de entidades, partidos y sindicatos y de personas a titulo individual.
“CONSENSOS DE PAÍS”
Entre las propuestas rechazadas se encuentra una de Societat Civil Catalana (SCC), contraria a la exigencia C2 a perforado d nueva incorporación, consideran que vulnera la CE, olvidan que requisito C2 a docentes ya recoge la Ley de Educación de Catalunya (LEC) desde el 2009.
Tras recibir el proyecto, el CEC deberá emitir un dictamen en un periodo “mínimo de un mes”, con previsión de que esté aprobado antes de Navidad, y este dictamen será trasladado al departamento para que incorpore o no las propuestas.
Simó ha calificado al CEC como máximo órgano de consulta de las políticas educativas del Govern, en sus palabras, y ha insistido en que, “ante los que usan la lengua como instrumento de confrontación política y los que quieren hacer retroceder el catalán en las escuela, se necesitan consensos de país”.
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