El Gobierno presenta unas cuentas con 522,3 millones de ingresos y 553,7 de gastos
ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 3 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Andorra ha presentado este lunes el presupuesto para el 2023, “el primero ordinario después de la pandemia” y prevé una inversión real que asciende a 44 millones de euros, además de un déficit de 31,5 millones.
El ministro de Finanzas de Andorra, Eric Jover, ha expuesto en una rueda de prensa los detalles del documento, que incluye unos ingresos de 522.306.991 euros y unos gastos totales de 553.756.991 euros, por lo cual se proyecta un déficit de 31.450.000 euros, aunque “se prevé que termine siendo menor una vez liquidado el presupuesto, como en los últimos años”, ha reconocido Jover.
Entrando al detalle de los ingresos (522 millones), el ministro ha destacado que suponen un aumento del 12% respecto al 2022, sobretodo por un incremento significativo de los impuestos directos e indirectos (+20% y + 10%,respectivamente).
Aunque la cifra parece “alta”, des del ejecutivo la consideran muy conservadora teniendo en cuenta las cifras de ejecución del 2022, que quedaron muy por encima, según él, de las estimaciones iniciales.
El ministro también ha destacado el capítulo de ingresos patrimoniales, que mantiene la distribución de dividendos procedentes de Andorra Telecom (la compañía de telecomunicaciones), pero en cambio no contempla ningún ingreso por parte de FEDA (la compañía eléctrica), ya que esta dirige todos sus esfuerzos a “moderar” el impacto de la crisis energética en la ciudadanía.
Por primera vez, en cambio, el Consejo Regulador Andorrano del Juego (CRAJ) genera superávit después de su acuerdo con la SELAE española, por lo que también “harán una aportación al Estado”, ha remarcado Jover.
GASTOS
De los 553 millones de gastos, los de funcionamiento suman 453,4 millones, los de capital ascienden a 82,7 millones y los financieros, 17,5, un crecimiento “también notable, del 12%”, ha señalado el ministro.
El incremento se da tanto por el mayor gasto de personal –relacionado con la revaloración de los salarios vinculado al IPC o el incremento de personal, en buena parte, por el plan de choque para “desatascar” trámites judiciales–, como por el aumento de transferencias corriente y, sobre todo, por una mayor inversión real.
Jover ha dejado claro que la voluntad del Gobierno es “reforzar la inversión pública una vez superada la crisis provocada por la pandemia” y es por ese motivo que el ejecutivo destinará 44 millones de euros a inversión real, una cifra más de un millón de euros superior a la presupuestada en 2019.
A la inversión directa del Gobierno se suman también 38,3 millones que invertirán las entidades públicas a través de las transferencias de capital, hecho que supone llegar a los 82,7 millones de inversión en total.
“PRESUPUESTO ORDINARIO”
Por todo esto, el titular de Finanzas ha destacado que ser trata de un “presupuesto ordinario” porque permite volver a invertir en infraestructuras necesarias dejando atrás la crisis sanitaria.
Las inversiones se centran especialmente en aspectos como la vivienda, que suma una partida de 17 millones (en 2019 eran 2) y destacan los 6,6 millones para construir pisos a precio asequible en los terrenos de la Borda Nova, la compra de pisos (5 millones) y los pisos tutelados del Centro Residencial de Educación Intensiva (1 millón).
También se prevén 3 millones para el helipuerto nacional, 2,7 para el desvío de la Massana y un incremento de 4,7 millones en gasto de transporte público para mantener la gratuidad del servicio de autobús.
Jover ha expuesto que la mitad de las partidas del año que viene, un 54% del total, se relacionan directamente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), vinculados con el estado del bienestar.
En global, ha definido el documento como un presupuesto que “vuelve a la normalidad”, que refuerza los pilares del estado del bienestar y que afronta –en sus palabras– la problemática de la vivienda y del poder adquisitivo de forma decidida, ha valorado.
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