VALLADOLID, 25 (EUROPA PRESS)
Representantes sindicales de Policía Nacional y Local consideran Valladolid una capital “segura”, mientras que agentes de la Guardia Civil exigen “más efectivos” para trasladar esas “cuotas” de seguridad a la provincia después de un año marcado por el incremento en un 300 por cien de homicidios dolosos y asesinatos consumados.
Así han analizado los datos de criminalidad, actualizados hasta el mes de septiembre de 2022, el secretario provincial y autonómico del Sindicato Unificado de Policía, José Robles Campos, el responsable de Policía de la FSC-CCOO Castilla y León, Alberto Fernández Gamazo, y un representante de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Valladolid.
En declaraciones a Europa Press, Tanto Robles Campos como Fernández Gamazo han asegurado que Valladolid es una capital “segura” a pesar de que el número de homicidios se ha disparado un 300 por ciento, según indican los datos del Sistema Estadístico de Criminalidad del Ministerio del Interior, al pasar de dos a ocho. “Nosotros preferimos hablar de número y no de porcentajes porque inducen a error y generan mayor alerta social”, apunta Robles Campos.
Al hilo de estas palabras, el dirigente del SUP matiza que los homicidios es un delito “imprevisible” y que los cuatro casos que se dieron en la capital –el triple crimen de la Rondilla y el matricidio también en el mismo barrio– se resolvieron “en el mismo día”.
“Se ha dado una respuesta en concordancia con el delito”, resumen ambos dirigentes sindicales que defienden que desde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se está haciendo una labor “excepcional” para que el ciudadano tenga esa “sensación de seguridad” en la capital, añade Fernández Gamazo para considerar que este tipo de delitos no son una manifestación de “inseguridad”.
En este sentido, han valorado el trabajo que se está haciendo en delitos vinculados a la libertad e indemnidad sexual, con un 13,6 por ciento menos (de 66 a 57 casos) y del 92,3 por ciento en agresiones sexuales con penetración (de 16 a 1). “Se trabaja en concienciación y prevención y eso se está traduciendo en mayor eficiencia en estos casos”, explica el representante del SUP.
Además, recuerda el responsable de Policía de la FSC-CCOO Castilla y León, las administraciones han reforzado los efectivos para “dotar de seguridad” a quienes sufren este tipo de violencia. “Todos esos esfuerzos”, añade, se traducen en estos datos “que tienen que seguir mejorando”.
Por otra parte, los representantes de los dos cuerpos de seguridad que operan en la capital se encuentran “en alerta” ante la proliferación de bandas latinas, si bien, insiste, en Valladolid todavía no se ha dado “ningún conato reseñable” y la problemática “no es tan grave” como en Madrid. “Hay grupúsculos, pero poco más”, señala Robles Campos, que también valora la labor de prevención que se está haciendo al respecto.
REIVINDICACIONES
En cuanto a las reclamaciones que ambos cuerpos realizan, las quejas de la Policía Nacional se centran, sobre todo, en que se mantenga el turno 6 por 6, porque “permite una buena conciliación”, “ligeros retoques en los catálogos de puestos de trabajo”, la “reclasificación del Grupo B de la escala básica”, “copago por parte de los clubes deportivos por la seguridad que ofrece el cuerpo Nacional de Policía” y, por último, y que es una de las cosas “que más preocupa”, mejorar en salud mental.
“Se están dando demasiados casos de suicidio entre los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y eso nos preocupa sobremanera. Desde SUP estamos trabajando con psicólogos a través de la plataforma Vive CNP para que aquellos agentes que se encuentren mal o tengan conocimiento de que algún compañero tiene algún problema puedan llamar por teléfono a estos profesionales y les ayuden. Aquí en Castilla y León estamos trabajando para contar también con la nuestra”, ha agregado.
En este sentido, Fernández Gamazo recuerda que la salud mental es “tan importante” como la física y recuerda que son profesionales sometidos a un “alto grado de presión”.
El representante de CCOO centra su reivindicaciones en la mejora del material y en contar con una plantilla “óptima” de acuerdo con la ciudad, si bien, en este caso, valora el esfuerzo que el Ayuntamiento está haciendo de renovación de plantilla. “Ahora mismo podríamos hablar de unas 40 vacantes”, ha concretado.
LA PROVINCIA, MÁS INSEGURA
Desde la AUGC, advierten de que si bien cierto que Valladolid es una provincia “segura si se compara con otras como Cataluña, Comunidad Valenciana o Andalucía”, los datos del Ministerio del Interior a demuestran un “incremento notable” de la delincuencia.
“Un ejemplo, los robos con violencia e intimidación crecieron un 44 por ciento en el 2021, y en 2022 aumentaron nuevamente un 13 por ciento con los datos contabilizados hasta septiembre, lo que indica que cada año la estadística se acumula y aumenta”, explica el representante de la asociación en Valladolid.
El incremento de infracciones en la provincia con respecto a la capital se debe, a su juicio, por una “alarmante” falta de agentes de la Guardia Civil y una “ineficaz” gestión operativa de los recursos existentes.
“Mientras que, para dar seguridad a más de 100.000 habitantes censados en el área metropolitana de Valladolid, la plantilla es de 110 guardias civiles; en Valladolid capital, para 300.000, la plantilla de Policía Nacional es de 800 efectivos, a los que habría que sumar los 400 de Policía Municipal. Esto se debe a una nefasta planificación, ya que desde el año 1996, según datos del INE, la población en el área metropolitana ha crecido más de un 150 por ciento, sin que se haya producido un aumento significativo del catálogo de efectivos en Guardia Civil”, añade.
A la “escasez” de efectivos, continúa AUCG, se suma que la Guardia Civil es el único de estos cuerpos que “carece de coordinadores” de servicio en la calle, “lo que obliga a que las escasas patrullas existentes queden inoperativas durante horas en cuanto se produce una simple detención”.
“De la suma de todas estas carencias, el resultado es que tenemos unidades que no sacan una sola patrulla en toda la semana, y que ninguna de las 24 unidades territoriales es capaz de disponer de una patrulla en la calle las 24 horas con el personal destinado”, lamenta.
Una situación que, en sus palabras, evidencian los datos, como los que ofrece Arroyo de la Encomienda, donde aumentaron un 71 por ciento los hurtos, un 66 por ciento la sustracción de vehículos y un 250 por ciento los delitos de lesiones y riñas tumultuarias.
La otra población con más de 20.000 habitantes, que son las que cuantifica el Ministerio del Interior, y que también es competencia de Guardia Civil, como Laguna de Duero, también aumentaron las cifras de forma “preocupante”. “Un 500 por ciento los delitos de lesiones y riñas tumultuarias, un 600 por ciento los robos con violencia o intimidación, o un 33 por ciento los robos en domicilios”, concluye.
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