LEÓN, 13 (EUROPA PRESS)
Una recogida de firmas a través de una plataforma digital trata de lograr una “amnistía” para 500 hectáreas de viñedos viejos en la comarca del Bierzo (León), que la Junta de Castilla y León no inscribió en el Registro Vitícola (REVI) y que la Unión Europea podría instar a su desaparición en el marco de un proceso de regularización.
El promotor de la plataforma ‘Bierzo fuera de serie’ que promueve esta iniciativa, el viticultor Nacho León, pretende con esta iniciativa, que lleva recogidas más de 300 firmas, exigir a la Junta de Castilla y León la “inscripción inmediata” de estas viñas históricas, que han pasado de manos mediante contratos verbales a lo largo de la historia.
León ha explicado en la plataforma de recogida de firmas que la administración autonómica debería haber inscrito en el REVI a todos los viñedos, pero “muchos no aparecen por lo que es imposible su regularización”, lo que pone en duda la continuidad de estos cultivos que generan un “paisaje único en el mundo”, que se “ve amenazado”.
“Muchos viñedos no aparecen por lo que es imposible su regularización” por lo que estas viñas históricas conforman un “viñedo injustamente ilegal” y reclama ahora a la Junta de Castilla y León que se incorporen a los registros para que la Unión Europea pueda contar con ellos en su proceso de regularización.
ACUERDOS VERBALES
De esta forma, Nacho León ha explicado que a esta situación se ha llegado por la particular forma en la que estos viñedos han ido pasando de manos a lo largo de los años, es decir, con una ausencia de documentos “derivada de la tradición y de la cultura berciana”, basada en traspasos “de palabra” o, lo que es lo mismo, acuerdos verbales entre propietarios.
Por eso, mediante esta recogida de firmas se reclama una “aceptación de los contratos verbales como forma jurídica legal de singular importancia en esta situación excepcional” porque, de lo contrario, según considera, se estaría cayendo en una “violación de los derechos del viñedo histórico berciano”, que supondría la “exterminación de un patrimonio” que hace “única” a la comarca.
Así, el que no pasen de forma automática a los registros supondría la “pérdida de una tradición insustituible”, así como la “aniquilación de un irremplazable patrimonio genético y paisajístico” que generan estas viñas históricas en una comarca que aglutina “la mayor parte del viñedo viejo” del país que, además, se encuentra también “amenazado” por la construcción de parques de energía eólica y solar en la comarca.
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