Inicio Castilla y León La vecina que cortó la cuerda a un operario que retiraba la...

La vecina que cortó la cuerda a un operario que retiraba la chimenea de una taberna en Valladolid ha sido multada

0

El trabajador, que quedó sin cuerda debajo de él, quedó colgando media hora a unos nueve metros de altura y tuvo que ser rescatado por otros compañeros

VALLADOLID, 11 (EUROPA PRESS)

La mujer que en septiembre de 2020 cortó la cuerda a un operario de una empresa de trabajos verticales en pleno centro de Valladolid, concretamente en la calle Núñez de Arce, y que quedó colgando a gran altura del suelo, ha sido condenada por delito de coacciones y un delito leve de daños.

En su sentencia recogida por Europa Press, el Juzgado de lo Penal número 3 de la ciudad considera a la citada mujer, M.V.R.M, ha sido multada con 3.600 euros por el primero de los delitos y con otros 240 por el segundo de ellos. Además, en concepto de responsabilidad civil, la condenada habrá de indemnizar al trabajador afectado en la cantidad de 1.000 euros por daño moral y con otros 910 a su empresa, Alturas Halcón, por los daños ocasionados en las cuerdas utilizadas en los trabajos–costaban 289,26 euro más IVA–y para compensar el abono que dicha mercantil tuvo que realizar ante la imposibilidad de llevar a cabo la retirada del material de amianto.

Leer más:  La Diputación de Valladolid ha activado el setenta y cinco por ciento de las acciones del Plan de Responsabilidad Social Corporativa

“Dos líneas argumentales de la defensa se entrecruzan para mantener su inocencia: nadie ha visto a la acusada cortar las cuerdas y nadie ha probado que las cuerdas fueran cortadas y no se rompieran accidentalmente. No se puede estar más en desacuerdo con ambas teorías”, censura el juzgador, quien, sobre todo, descarta la segunda de ambas hipótesis a tenor del corte limpio que presentaban la soga “y, desde luego, dicho corte por el uso o rotura nunca se produciría en la zona de la cuerda que no soporta peso alguno, sino por encima del trabajador”.

“¡SE APAÑA!”

Aunque es cierto que nadie vio a la condenada cortar la cuerda, el juez recuerda que el trabajador sí vio una mano femenina tirando de las cuerdas hacia el interior de la vivienda y éste y otro operario oyeron a la acusada, antes de empezar a trabajar, cómo les llamaba la atención para que no rompieran nada, que lo dejaran todo limpio y como estaba, “voz que identifican con la de la mujer que responde con un “¡se apaña!” cuando el operario que quedó colgado voceó “me ha cortado las cuerdas” y cuya mano es la misma que, tras meter las cuerdas por la ventana del piso, ven cuando arrojó los restos de la soga al patio interior.

Leer más:  La empresa soriana Tableros Losán mantiene los 48 despidos del ERE a pesar de continuar las negociaciones

“Por lo tanto, fuera o no fuera físicamente la persona que por sí sola o con otro u otros cortó las cuerdas, lo cierto es que cooperó activamente en dicho corte metiendo la cuerda y tirándola después, que sabía lo que se estaba haciendo y que asumía el resultado”, sentencia el titular de Penal 3.

El suceso se produjo sobre las 09.00 horas del día 17 de septiembre de 2020 en un edificio sito en el número 4 de la calle Núñez de Arce, donde cuatro operarios de una empresa de trabajos verticales, Alturas Halcón SL, trabajaban en el inmueble para ayudar al desmantelamiento de la antigua chimenea de extracción de humos de Casa Pedro, local que había cambiado de dueños y que iba a seguir explotado como taberna.

Uno de los trabajadores se hallaba en el tejado, dos abajo y uno, S.M.U, suspendido en el patio interior del edificio sujeto por unas cuerdas y un arnés mientras desmontaba la canalización antigua, toda vez que los nuevos propietarios del negocio habían instalado una nueva para evacuar humos, más segura–la anterior era de amianto–y cumpliendo la normativa vigente.

Leer más:  Dos residentes en Toledo están siendo investigados por maltrato animal y estafa relacionada con la venta de un Yorkshire Terrier

Fue entonces cuando una vecina del edificio, M.V.R.M, al parecer en contra de la reapertura del negocio para uso hostelero, introdujo las cuerdas en su vivienda a través de la ventana y cortó las mismas por debajo del trabajador, con lo que éste quedó atrapado al no poder descender hasta el suelo. Al recriminar el trabajador la conducta de la acusada, ésta voceó “¡te apañas!”, lanzando los trozos de cuerda restantes al patio interior de la comunidad.

El operario permaneció entonces colgando durante unos treinta minutos a una altura de unos nueve metros, con el consiguiente susto hasta que sus compañeros lograron rescatarle desde el tejado mediante el empleo de otras cuerdas. El incidente, además de la angustia sufrida por el trabajador, obligó a suspender tanto el desmontaje de la chimenea como el posterior traslado de la misma por parte de otra empresa hasta un centro autorizado.


- Te recomendamos -