El yacimiento arqueológico de la Sierra de Atapuerca denominado Cueva Fantasma ha sido el último de los espacios protegidos por la Junta de Castilla y León, mediante unas obras que han culminado con la construcción de una cubierta de aproximadamente 900 metros cuadrados y que han tenido un coste total de 300.000 euros. Esta actuación se ha llevado a cabo, no solo para la protección de Cueva Fantasma durante los trabajos de excavación, sino que prevé la accesibilidad a los distintos espacios, así como hacer posible su visita pública en el futuro, una vez concluidos los trabajos de campo.
El director general de Patrimonio Cultural, Enrique Saiz, ha inaugurado hoy los trabajos de protección del yacimiento de la denominada ‘Cueva Fantasma’, una gran cavidad situada a unos veinte metros por encima del yacimiento de Gran Dolina, en la ladera de Torcas, en la Sierra de Atapuerca.
Las labores de desescombro de una antigua cantera de piedra caliza llevadas a cabo en 2016 dejaron al descubierto los indicios de esta cavidad, con una galería en dirección NW-SE de unos 20 metros de ancho y 15 metros del atura, rellena completamente y con un gran registro fósil.
Los indicios hallados en su descubrimiento y desescombro apuntan a la existencia de restos de época Neandertal, incluso de restos humanos de esta especie, lo que planteó el alto interés para la investigación al completar la amplia secuencia, que supera el millón de años de antigüedad, que aporta el conjunto de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca. Esa necesidad de investigación en este yacimiento requería proteger la extensión que ocupaba la cavidad y el acceso a la misma, por lo que el Equipo de Investigación solicitó a la Junta de Castilla y León la necesidad de acometer un proyecto para construir una cubierta que garantizara el resguardo frente a agentes atmosféricos, así como la adecuación del entorno para favorecer el acceso a ‘Cueva Fantasma’.
Obras de la nueva cubierta de ‘Cueva Fantasma’
Las obras que ha llevado a cabo la Junta de Castilla y León han consistido en la construcción de una cubierta que ocupa una superficie aproximada de 900 m2, soportada por una estructura especial, similar a las que se han venido construyéndose en el yacimiento a lo largo de los últimos años -análoga a las realizadas tanto en la zona de recepción, como en los yacimientos de la trinchera denominados Elefante, Galería y Dolina-. Se trata de una estructura de cerchas y correas metálicas, apoyada sobre pilares de hormigón, sobre la cual se disponen placas de policarbonato, a la que se ha aplicado una proyección de barniz acrílico transparente para protegerla frente a la radiación ultravioleta.
De forma previa se llevaron a cabo varias operaciones para preparar el terreno para la construcción, realizándose el oportuno seguimiento arqueológico de los trabajos o la estabilización de los perfiles mediante muro de gaviones.
La obra, que comenzó en mayo de 2018 y ha finalizado en octubre de este mismo año, ha supuesto una inversión total de casi 300.000 euros, financiados por la Consejería de Cultura y Turismo, parcialmente con cargo a Fondos Feder.
Con esta actuación de la Junta se completa la protección de todos los yacimientos de la Sierra de Atapuerca en excavación arqueológica y se facilita la infraestructura básica para acometer y continuar los trabajos de investigación durante los meses de verano. Como en el resto de las estructuras construidas en el conjunto arqueo paleontológico, el diseño, no sólo se concibe para la protección de los rellenos y de los propios investigadores durante los trabajos de excavación, sino que se prevé la accesibilidad a los distintos espacios y, en el futuro, posibilitar su contemplación a los visitantes, una vez concluidos los trabajos de campo.
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