Aseguran que la Junta no ha impuesto sanciones desde 1988 pese al “estado deplorable” de las instalaciones
VALLADOLID, 17 (EUROPA PRESS)
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid ha asegurado este miércoles que los “datos nuevos” que ha conseguido indican que la Junta de Castilla y León ha actuado “con negligencia prolongada” y culpan a la Administración autonómica que no ha realizado inspecciones desde hace “13 años” y no ha impuesto una sanción desde hace 35.
En un comunicado recogido por Europa Press, el PSOE apunta que si la semana pasada se conoció que la Junta “no había cobrado nunca el canon”, este miércoles los ediles del PSOE en el Ayuntamiento de Valladolid han añadido estos datos, que señalan que en los últimos 35 años la Junta “ha realizado únicamente diez inspecciones” en la estación situada en la calle Puente Colgante y que ha habido un periodo de 13 años “sin ninguna supervisión de las instalaciones”.
Además, en esos 35 años no se ha incoado expediente sancionador alguno “a pesar de que los funcionarios sí detectaban anomalías y deficiencias que debían corregirse”, algo que evidencia la “falta de control” por parte de la Junta.
Por ello, el balance que hace el PSOE es que la empresa concesionaria de la estación trabaja “sin canon, sin sanciones y sin apenas inspecciones” y, además, reprochan que el actual alcalde, Jesús Julio Carnero, la “respalda”.
De hecho, consideran a Carnero “cómplice del abandono de las instalaciones”.
“A partir de ahora el alcalde es también responsable junto al Gobierno Regional de que no se construya la nueva estación de autobuses en Delicias, contemplada en el proyecto de la Integración Ferroviaria”, ha añadido el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Pedro Herrero, ya que interpreta que Carnero avaló públicamente la gestión de la Junta en unas declaraciones que realizó el pasado viernes, en las que afirmaba que la Junta de Castilla y León ha actuado con negligencia prolongada y que “está trabajando en el proceso que permita mantener la estación de autobuses en un uso adecuado mientras se produce la construcción de la nueva” estación.
Los datos que maneja el PSOE sobre las inspecciones indican que la primera acta de inspección de la Junta de Castilla y León a la empresa que gestiona la estación de autobuses de Valladolid tuvo lugar en 1999; es decir, once años después de que ésta se hiciera cargo de la concesión.
Desde entonces han sido diez las inspecciones realizadas, de las cuáles sólo seis hicieron referencia a las instalaciones, la última de ellas en 2010, hace trece años, si bien no incluyó el estado de los aseos, que según el PSOE “han permanecido sin inspeccionar desde 2004”.
Eso sí, el PSOE apunta que existe un acta de inspección del año 2015, hace nueve años, aunque solo versa sobre la antigüedad de los autobuses de la línea Valladolid-Aranda de Duero.
La empresa concesionaria ‘Estación de autobuses de Valladolid S.A’, según apunta el PSOE, está compuesta a su vez por las Linecar (38 por ciento), La Regional Vallisoletana (30,8 por ciento), AutoRes SL, Galo Álvarez SA, Grupo Enatcar y Cabrero (un 7,69 por ciento cada una de ellas) y otras (0,44 por ciento).
Dicha documentación, añade el PSOE, que la Directora General de Transportes y Logística de la Junta solicitó en dos ocasiones a la empresa concesionaria que “extreme el mantenimiento de la infraestructura”.
La primera de ellas el 28 de julio, “al día siguiente de que el PSOE pidiera la información”, y la segunda el pasado 23 de octubre.
Ambas solicitudes de la Junta aluden a supuestas inspecciones de cuya existencia no se ha dado cuenta a los socialistas junto con las demás.
DEFICIENCIAS
En los informes de inspección a los que ha tenido acceso el PSOE, según su comunicado, se indican deficiencias a lo largo de los años como el mal funcionamiento de puertas automáticas, la información incorrecta sobre las tarifas, la mala conservación de las cocheras, las pintadas en los aseos, urinarios que pierden agua, retretes cerrados y “fuerte olor a orina”, o la suciedad en las dependencias en general.
Las últimas actas de inspección a las que se refiere el PSOE indican, en mayo de 2010, solamente deficiencias de las taquillas; y, en 2015, sobre la antigüedad de los vehículos que cubren la línea Valladolid-Aranda de Duero.
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