Aseguran que el propietario de un restaurante pasará de pagar 900 euros de IBI en 2024 a 2.243 entre este impuesto y la nueva tasa en 2025
VALLADOLID, 27 (EUROPA PRESS)
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid ha insistido este viernes en las críticas al funcionamiento de la nueva tasa sobre la recogida de residuos que entrará en vigor en 2025 porque consideran que los contribuyentes no van a pagar en función de los residuos que realmente generan, “tal y como exige la Ley”, mientras que apuntan que perjudicará especialmente a propietarios de viviendas vacías y de locales de hostelería.
Según advierte el portavoz del PSOE, Pedro Herrero, en un comunicado recogido por Europa Press “el Ayuntamiento Valladolid no va a premiar a quienes reciclen y, por tanto, no se cumple el sentido de la norma”.
De ello consideran un “claro ejemplo” que las viviendas y locales vacíos, donde no se generan residuos, van a pagar la tasa, lo que según el portavoz del Grupo Municipal Socialista constituye “una subida encubierta del Impuesto de Bienes Inmuebles”.
Así, según la tabla que especifica las cuotas para esta tasa, que se aplica a partir de 2025 en cumplimiento de la normativa medioambiental europea y estatal, el propietario de una vivienda vacía de 90 metros cuadrados pagará 57 euros por “no contaminar ni generar residuos”, según apostillan los socialistas.
Pero además, señalan que si en esa casa vivieran dos personas que no estén empadronadas en Valladolid, la tasa será también de 57 euros, ya que el sistema de cuotas solo tiene en cuenta si en ese domicilio hay personas empadronadas. Ya en el caso de que vivan dos personas que además tengan allí su domicilio, pagarán más: 72 euros “reciclen o no”.
Asimismo, indican otros casos como los de propietarios de locales vacíos, que tendrían que pagar 161 euros si es de 90 metros y pese a que no tenga actividad y, por lo tanto, no genere residuos.
Por ello, el PSOE recuerda que la Ley “exige que los contribuyentes paguen en función de los residuos que realmente generan, o bien de su comportamiento en materia de separación de residuos”, algo que entienden que en la aplicación de la tasa en Valladolid no se cumplirá, pues no incentiva a quienes reciclan.
Otros ejemplos, según el PSOE, “evidencian la subida fiscal y el alcance de la nueva tasa de basuras porque también va a perjudicar a determinados negocios, sin ninguna distinción”.
Así, el propietario de un restaurante de 200 metros cuadrados que este año haya pagado 900 euros de Impuesto de Bienes Inmuebles, el año que viene pagará 2.243 euros entre el IBI y la tasa de basuras, un concepto que el PSOE recuerda que está incluido en la normativa del tributo inmobiliario desde los años 80 del pasado siglo.
Aunque este impuesto se reduzca en un 5 por ciento en 2025 y el hipotético local de hostelería tenga que pagar 855 euros por dicho concepto, tendrá que sumar a su tributación la tasa de basuras que le corresponde (1.388 euros). En total, ese hostelero pagará 2.243 euros, más del doble que en 2024.
Por su parte, un hotel de 300 metros cuadrados que pagaba 1.300 euros en concepto del IBI en 2024, el próximo año va a va a abonar 1.235 euros por IBI (un 5 por ciento menos) y 1.711 euros por la tasa de basuras. En total 2.946 euros, también más del doble que este año.
DOBLE TRIBUTACIÓN.
El Grupo Municipal Socialista subraya que “con esta tasa de basuras el equipo de gobierno PP y Vox va a cobrar dos veces a los vallisoletanos por el servicio de recogida de residuos y sin ninguna mejora”.
Esto, recuerdan, ya sucedió en 2014 cuando en la etapa de Javier León de la Riva, el PP “impuso” la tasa de basuras, cuando ellos defienden que el coste del servicio de recogida ya está integrado en el Impuesto de Bienes Inmuebles desde 1984.
Por esta razón, apuntan que el exalcalde del PSOE Óscar Puente “cumplió su promesa” de eliminar dicha tasa cuando llegó a la Alcaldía en 2015 y dejó de pagarse en 2016.
El Grupo Municipal Socialista reconoce que esta nueva tasa de basuras no se podrá eliminar como entonces, puesto que está sujeta a una Ley estatal, pero reitera que “nada impide a Carnero y sus socios compensar a los contribuyentes con una bajada del recibo del IBI equivalente al coste del servicio de recogida”.
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