VALLADOLID, 1 (EUROPA PRESS)
La Junta de Castilla y León cumplirá el próximo curso con uno de los objetivos de su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, que es implantar la gratuidad en la enseñanza en la etapa de 0 a 3 años.
De momento, ya se ha implementado en los dos últimos años, es decir de 1 a 2 y de 2 a 3 años y, desde enero, en palabras de la consejera de Educación, Rocío Lucas, comenzarán a trabajar para planificar ese último eslabón pendiente que es el ciclo de 0 a 1 año.
“Fue una apuesta clara del presidente Mañueco la de aumentar la gratuidad y permitir también que seamos una sociedad y una Comunidad en la que damos oportunidades para la conciliación, la mujer y la educación, porque también hay informes internacionales que señalan que cuanto antes comience la educación, en etapas más tempranas, mejor aprovechamiento y mejor rendimiento académico, afectivo y emocional tiene el alumnado”, ha explicado Lucas en declaraciones a Europa Press.
De momento, 17.000 alumnos –10.000 en la etapa de dos a tres y 7.000 de 1 a 2 años– se benefician de esta medida y que supone una cifra “orientativa” de las matriculaciones que se pueden hacer de cara al próximo año en el último ciclo. “Si que es verdad que al ser más pequeños hay padres que, con permisos de paternidad y demás, pueden aguantar más en casa, pero entendemos que se moverán por ese baremo y el proceso será abierto”, ha incidido la responsable de educación.
La inversión para esos dos primeros años es de 76 millones, “sufragado prácticamente todo con dinero autónomo”, ha matizado Lucas que señala que con los 38 millones llegados de fondos europeos para las tres etapas “solo” se podrían matricular “mil alumnos por año”.
Con esta etapa se cierra el ciclo de educación gratuita hasta los 16 años en Castilla y León, algo que el propio presidente de la Junta calificó de “hito histórico” al inicio de este curso.
Un sistema educativo, el castellanoleonés, que viene avalado por los datos del último informe PISA y en el que, por primera vez, una autonomía ha sido la mejor en todas las modalidades evaluadas. “Ha sido un éxito colectivo e histórico y todo lo trabajado durante estos años tiene ahora sus frutos”, apunta la titular de Educación.
Eso hace que el balance del año, a caballo entre los cursos 23 y 24, sea de “sobresaliente alto”, nota que pone a “toda la comunidad educativa”, desde los alumnos, profesores, “pilar fundamental” y familias “que se implican siempre con la educación”. “Todo acompañado de unas políticas que siempre se han tomado la educación en serio. Siempre priorizamos la educación y lo va a seguir siendo en los próximos presupuestos”, ha avanzado.
En este sentido, ha apuntado que se seguirá avanzando en llevar a la educación “más lejos”. “Ahora tenemos transporte a los de bachillerato del mundo rural gratis, también el transporte a la formación profesional, hemos mejorado las becas para que también sea una formación de excelencia y en el ámbito universitario vamos a seguir apostando por esa calidad también de la educación con la bajada de tasas, la mejora de becas y la apuesta por la investigación”, ha enumerado como puntos claves para el año que entra.
INFORME 2018
Todo ello siguiendo unas políticas que les han permitido “crecer”, detalla Lucas que pone como ejemplo los resultados del informe PISA de 2018, donde la “Comunidad retrocedió”. Se analizaron los motivos para así “hacerse fuertes” a partir de entonces. Así, se optó por la presencialidad “responsable y segura” en las aulas en cuanto la pandemia dio un respiro “a pesar de la gran logística que se tuvo que emplear para llevarla a cabo –“contratación de profesores, desdoblar aulas…”–.
“Eso ahora también está dando sus frutos”, ha incidido Lucas que también subraya las clases de refuerzo “gratuitas” para “todos aquellos” que las precisaron. “Tenemos la comunidad educativa mejor de España y estamos entre los diez primeros de los 80 países que se evalúa”, ha apostillado.
Por último, Lucas también ha querido destacar la “equidad” del sistema educativo de Castilla y León, con los índices más bajos de acoso escolar del país, a través de programas como el “Plan Director”, y sin “apenas” diferencias entre alumnos y alumnas ni entre la escuela rural y la urbana.
“Es un sistema, como digo, completo, que cuida la parte académica y la parte menos académica, pero que sigue siendo parte muy importante para la formación como personas humanas que es lo que pretende también la educación”, ha concluido.
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