VALLADOLID, 10 (EUROPA PRESS)
El presidente del Consejo de Cuentas de Castilla y León, Mario Amilivia, ha recomendado llevar a cabo actuaciones para volver a un margen de funcionamiento en niveles positivos, así como “vigilar el endeudamiento.
Éstas son algunas de las recomendaciones que Amilivia ha expuesto durante su presentación ante la Comisión de Economía y Hacienda de las Cortes del informe sobre el análisis económico y financiero del impacto de la COVID-19 en el sector público de la Comunidad.
En concreto, el presidente del Consejo de Cuentas ha concretado que, desde el punto de vista de liquidación del presupuesto, la Comunidad “debería llevar a cabo actuaciones para que el margen de funcionamiento alcance niveles positivos”.
En relación con la solvencia, considera “aconsejable” vigilar el indicador de endeudamiento general y los índices de inmovilización y firmeza, con el fin de “garantizar mayor independencia frente a terceros, así como una mayor estabilidad patrimonial”.
Amiliva también ha considerado que la Comunidad “debería realizar actuaciones para corregir el desequilibrio financiero a corto plazo existente” y “debería corregir la tendencia inadecuada del indicador de liquidez inmediata”.
También ha apuntado que, teniendo en cuenta que los gastos ocasionados por la pandemia “son coyunturales y en buena medida no han de convertirse en gasto estructural”, la Comunidad “debe establecer un sistema específico en las partidas presupuestarias o fuentes de financiación para identificar los gastos e ingresos derivados de las medidas aplicadas como consecuencia de la COVID-19 en el ejercicio 2020, más allá de los textos de los documentos contables”.
EVITAR LA EXISTENCIA DE REMANENTES
Por último, Amilivia ha sentenciado que, en relación con el análisis funcional de los programas y subprogramas de gasto y su impacto derivado de la COVID-19, la Comunidad “debería ejecutarlos siendo coherente con las modificaciones presupuestarias que aprueba”, evitando así “la existencia de remanentes de crédito a final del ejercicio”, especialmente “en aquellos en los que su peso relativo es mayor y se encuentran afectados por la pandemia”, al tiempo que ha deseado un “sistema fiable” en el futuro que permita conocer “el gasto real” derivado por la COVID.
Durante el turno de intervención de los diferentes grupos políticos, la procuradora socialista Rosa Rubio se ha remitido a los datos ofrecidos en el informe sobre el gasto y la llegada de fondos para hacer frente a la situación extraordinaria para defender la “respuesta ejemplar” del Gobierno de España frente a la ofrecida por la Junta de Castilla y León.
Estas afirmaciones han generado un debate con la ‘popular’ Leticia García Sánchez, quien ha criticado la “negligencia” del Ejecutivo central, que “despojó de competencias” a las comunidades autónomas y, tras generar “un cuello de botella” del material sanitario requerido en aquel entonces bajo la fórmula “del mando único” y que rectificó posteriormente dejando la gestión “en manos de las autonomías”.
Por su parte, el procurador de Vox Francisco Javier Carrera, ha reclamado “políticas rigurosas” de control de gasto, al tiempo que ha censurado a aquellos que abogan por “endeudar al país por motivos ideológicos”, ya que “la de hoy son los impuestos del mañana”.
Por parte de UPL, José Ramón García, ha advertido de que pese al incremento de gasto en educación “habría que hablar largo y tendido” de la situación del profesorado, mientras que el procurador de Podemos, Pablo Fernández, ha destacado el importante porcentaje dedicado a seguridad ciudadana durante la pandemia.
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