TOLEDO, 14 (EUROPA PRESS)
La dirección de la empresa de calzados Pablosky y la representación legal de sus trabajadores han acordado este jueves darse la oportunidad de negociar medidas no traumáticas que garanticen el futuro del empleo y de actividad productiva en Fuensalida (Toledo).
En el acto de mediación previo a la convocatoria de huelga instado por el comité de empresa y los sindicatos que lo integran (CCOO-Industria y UGT-FICA), que se ha celebrado esta mañana en el jurado arbitral de Toledo, la dirección de la empresa asumió prolongar hasta el 8 de enero el periodo de consultas del ERE que había planteado para despedir a 48 personas –el 15% de su plantilla– y cuyo plazo concluía el próximo día 28.
Y expresó además su voluntad de que esas negociaciones se encaminen a resolver el conflicto evitando los despidos traumáticos y priorizando las salidas voluntarias, según han informado los sindicatos CCOO y UGT en nota de prensa.
La representación de la parte social, por su parte, deja en suspenso la convocatoria de la huelga que iba a comenzar el próximo martes, día 19; y reiteró su disposición a plantear, negociar y acordar medidas que garanticen la viabilidad de la empresa y el mantenimiento del empleo y de la actividad productiva en Fuensalida.
El comité de empresa y los sindicatos han convocado este viernes a la asamblea de trabajadores para informar a la plantilla de lo acordado y para que todas las personas que la integran puedan disfrutar de las navidades “sin la tensión” que implica todo conflicto laboral; y con la mínima incertidumbre sobre el futuro de sus empleos.
Pablosky (Calzados Pablo SLU) es una empresa familiar española líder en el diseño, fabricación y venta de calzado infantil y juvenil. Fundada en 1969 por Juan pablo Martín-Caro, padre y abuelo de sus actuales propietarios y directivos, tiene en la actualidad presencia comercial en más de 60 países. Su posicionamiento en el mercando mundial del calzado infantil y juvenil le permitió ingresar el pasado mes de marzo en el Foro de Marcas Renombradas Españolas.
Hasta la presentación del ERE que ahora deja en suspenso, calzados Pablosky no había protagonizado ningún despido colectivo en sus 54 años de historia. Sus trabajadores y sus representantes sindicales expresaron desde el primer momento su rechazo y su alarma tanto por la destrucción de empleo como por la deslocalización de la producción del calzado hacia Marruecos.
El comité de empresa, CCOO-Industria y UGT-FICA, confían en que tras la disposición negociadora expresada hoy tanto por la empresa como por la representación de la plantilla, sea posible alcanzar un acuerdo que garantice el futuro de esta emblemática fábrica toledana y el mantenimiento de la actividad productiva y del empleo en Fuensalida.
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