CUENCA, 10 (EUROPA PRESS)
El colegio ‘Padre Burriel’ de Buenache de Alarcón, que quedó asolado tras el paso de la DANA del pasado 2 de septiembre, ha reabierto sus puertas este viernes, una vez finalizadas las obras de reparación que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha ejecutado por vía de urgencia.
El delegado provincial de Educación, Cultura y Deporte, Gustavo Martínez, ha querido compartir parte de esta jornada tan especial con los vecinos de Buenache de Alarcón, y ha visitado el centro junto a la alcaldesa, Raquel Hortelano.
“No podía dejar de venir en este día porque a este pueblo le ha tocado vivir momentos muy duros, pero juntos están saliendo adelante y un paso importante para recuperar la normalidad normalidad es reabrir el colegio”, ha indicado Martínez.
Según ha informado el Gobierno regional, el delegado ha recordado que la gran riada del 2 de septiembre ocasionó daños muy graves en la sección de Buenache de Alarcón del CRA Ribera del Júcar, por lo que los 14 alumnos que tiene el centro tuvieron que comenzar el curso escolar el en las dependencias de la Casa de la Cultura el 11 de septiembre.
“En cuanto la emergencia lo permitió, la Unidad Técnica de la Delegación Provincial se desplazó aquí para evaluar los daños y comenzamos a tramitar la reparación de los mismos como obra de emergencia para no perder ni un minuto”, ha detallado del delegado provincial.
Estas obras, ejecutadas por la empresa pública Tragsa, se han prolongado durante unos dos meses porque “las humedades eran más graves de lo que en un principio parecía y se han querido hacer las cosas bien”.
Martínez ha querido agradecer la colaboración del Ayuntamiento, así como “la paciencia y buena disposición de los maestros y de las familias de los alumnos, pues rápidamente se adaptaron al nuevo espacio y gracias a ello los niños han podido acudir a clase con total normalidad”.
82.000 EUROS DE INVERSIÓN
En cuanto a las obras acometidas, que han supuesto una inversión por parte del Gobierno regional de 82.000 euros, ha indicado que comenzaron con retirada y limpieza de barro en todo el recinto escolar, pues el agua superó el metro de altura.
Asimismo, se han reparado y pintado todas las paredes de centro, se han renovado la carpintería de madera y buena parte del pavimento, sustituyendo el antiguo suelo por otro vinílico. También se ha cambiado la caldera.
Por lo que respecta al exterior, ha habido que reconstruir un muro del cerramiento, reparar los accesos al centro, tanto desde la calle como al propio edificio desde el patio; y nivelar y rellenar el patio arenero.
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