SANTANDER, 25 (EUROPA PRESS)
la Policía de Cantabria ha alertado de una modalidad delictiva que vuelve a tener incidencia en la región, consistente en estafas telefónicas que centran su diana en trabajadores y empleados de hostelería, pequeño comercio y pymes.
El empleado del establecimiento recibe una llamada de una persona que se hace pasar por un trabajador de una empresa de envíos y le comunica que va a recibir una mercancía (con documentación, papeles importantes, etcétera) pero que debe realizar un pago inmediatamente para poder recibirlo, fingiendo estar en conversación telefónica con el jefe o encargado del establecimiento que autoriza la operación, por lo que le apremia para que realice el pago mediante la compra de tarjetas prepago.
Esta persona, para evitar que el empleado pueda llamar a su jefe o encargado para comprobarlo, le pedirá que le facilite su número de teléfono móvil para realizar las gestiones desde el mismo y de esta manera mantener las dos líneas ocupadas (la fija y la móvil), apremiando siempre a la urgencia de realizar el pago, mediante compra de tarjetas de prepago de venta en establecimientos como estancos, quioscos, locutorios, supermercados, oficinas de correos, etcétera.
Éstas tienen códigos de activación que debe enviar rápidamente a través de fotos, siguiendo en todo momento las instrucciones del estafador que ha realizado la llamada.
Para dar más credibilidad, los timadores han obtenido previamente datos de los dueños de los negocios, como su nombre y apellidos, así como del local, para dar más confianza al empleado y mayor veracidad a la llamada.
En otras ocasiones esta estafa puede tener otra modalidad en la que el estafador puede hacerse pasar por un empleado de algún organismo oficial como el Ministerio de Sanidad, Hacienda, Seguridad Social, o el ayuntamiento.
En la llamada, el supuesto estafador informa de unos pagos que el establecimiento tiene pendientes (por ejemplo, por los permisos de los trabajadores, licencias de terraza, multa del local, etcétera) que debe abonar con urgencia para no ser sancionado, manifestando que su jefe o responsable tiene conocimiento y que le ha dado permiso para que realice el pago con dinero de la caja, simulando en algunas ocasiones que el jefe se encuentra con él y que autoriza el pago.
RECOMENDACIONES
Ante este tipo de estafas, la Policía Nacional recomienda una serie de consejos para evitarlas, como colgar la llamada y comprobar por sus propios medios la veracidad de lo que le están solicitando, poniéndose en contacto con el dueño o encargado del negocio que supuestamente autoriza el pago.
También, actuar con tranquilidad y hacer todo tipo de comprobaciones, y no realizar ningún pago ni facilitar información bancaria.
La empresa de mensajería u organismo oficial nunca va a exigir el pago de dinero mediante tarjetas prepago, lo que debe poner en situación de alerta.
La Policía aconseja mucho cuidado con las llamadas ya que pueden realizarse desde números suplantados mediante el sistema ‘spoofing’, en el que los números de teléfono que aparecen en pantalla tengan apariencia de numeración española pero que en realidad pueden estar ocultando una llamada efectuada desde cualquier otro país.
También, desconfiar de sanciones que se comunican por vía telefónica ya que no es un canal oficial.
Los trabajadores de estancos, supermercados, locutorios, oficinsa de correos, quioscos o cualquier otro establecimiento de venta tarjetas prepago deberían advertir a quien adquiera varias en la misma compra de que puede estar siendo víctima de una estafa.
Ante cualquier duda o sospecha, se debe contactar con la Policía Nacional e informar de todos los datos.
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