El Consejo Asesor de Bienestar Social también ha analizado hoy el decreto que regulará los centros sociales de mayores
La Consejería de Servicios y Derechos Sociales avanza en la tramitación de dos proyectos normativos: el anteproyecto de ley que regulará el apoyo de los perros de compañía a personas con discapacidad y el decreto que regirá el funcionamiento de los centros sociales de personas mayores dependientes del Principado. Tras los periodos de consulta previa e información pública, ambos documentos han sido trasladados hoy al Consejo Asesor de Bienestar Social, que se ha reunido en Oviedo bajo la presidencia de la consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela. Por un lado, el anteproyecto de ley garantizará los derechos de las personas con discapacidad que necesitan el apoyo de un perro de asistencia para desenvolverse en su entorno habitual. El objetivo es favorecer su autonomía personal, con el fin de que alcancen una mayor calidad de vida y una mejor inclusión social. El texto regula el reconocimiento de la condición de perro de asistencia y establece los derechos y obligaciones de las personas que pueden requerir este apoyo de manera temporal o permanente. Por otra parte, el decreto para regular los centros sociales de mayores aspira a unificar el funcionamiento de los 38 recursos de estas características dependientes del Principado y adaptarlos al nuevo perfil de las personas de edad en Asturias. En este sentido, la norma actualiza el concepto de centro social, que se convierte en un espacio participativo donde se desarrollan iniciativas de envejecimiento activo, prevención de la dependencia, cooperación y transmisión de conocimientos entre diferentes generaciones. Busca, asimismo, impulsar la colaboración con entidades sociales y propone órganos de participación y representación dinámicos, en los que introduce el criterio de paridad de género y el procedimiento de elección con un sistema de representación por actividad.
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