GIJÓN, 8 (EUROPA PRESS)
La directora general de Igualdad del Principado de Asturias, Nuria Varela, ha puesto en valor la lucha por los derechos de las mujeres y por la igualdad de estas con los hombres.
“El feminismo es una historia de éxito, sabemos cuánto nos ha costado cada centímetro de libertad, cada reconocimiento”, ha destacado Varela.
Así lo ha hecho durante su intervención en el acto institucional por el 8M, celebrado en el Centro de Cultura Antiguo Instituto de Gijón, en el que han participado, entre otros, el presidente regional, Adrián Barbón, y la alcaldesa gijonesa, Ana González, y en el que se ha dejado claro el compromiso del Gobierno regional con la igualdad, y este año sobre todo con las mujeres ucranianas, iraníes y afganas.
Varela ha querido trasladar, por otra parte, la idea del feminismo como una “linterna que ilumina unas habitaciones muy oscurecidas por la presión, por la violencia, por la desigualdad”, ha señalado Varela.
“Una linterna que las feministas empuñamos con mucho orgullo, porque es la herencia de millones de mujeres, que partiendo de la sumisión forzada, y mientras eran atacadas, ridiculizadas y vilipendiadas, supieron construir una cultura, una ética y unas ideologías nuevas y revolucionarias para enriquecer y democratizar el mundo”, ha agregado.
“Estamos cansadas, sí, y también un poco tristes este año”, ha confesado, no obstante. Por este motivo, ha sostenido que no queda otra que reivindicar este año más que nunca el 8M.
Al tiempo, ha incidido en que son casi 4.000 millones de mujeres en el mundo que aspiran a una vida digna. “Ya que hemos llegado hasta aquí, no vamos a parar hasta conseguirlo”, ha remarcado.
La alcaldesa de Gijón, por su lado, ha transmitido la “gran alería y honor” que supone para Gijón acoger este acto institucional del 8M, que ha visto un reconocimiento a la colaboración y cooperación entre el Ayuntamiento y el Instituto Asturiano de la Mujer en defensa de la igualdad.
González ha querido conmemorar, también, un logro feminista, impulsado por la unión de dos asociaciones asturianas, Mujeres por la Igualdad, de Laviana, y Tertulia Feminista Les comadres, de Gijón, con referencia al llamado Tren de la Libertad, que logró frenar la contrarreforma de la ley del aborto.
La regidora gijonesa ha señalado que ha habido avances e intentos de retroceso y ha advertido de que es un tiempo complicado para los derechos de las mujeres, donde las viejas estrategias se apoyan en las redes sociales que alientan el “odio” hacia las mujeres y acrecientan la desigualdad.
De hecho, ha advertido ante el incremento del discurso de odio, pero también sobre la negación y minusvaloración de las mujeres. “La desigualdad es agotadora, pesa mucho sobre las espaldas de quien la sufre”, ha indicado. Pese a todo ello, ha asegurado que van a seguir estando en la lucha.
Durante el acto ha tenido lugar también la actuación de cantautora Marisa Valle Roso, que ha interpretado unos temas muy ligados a la defensa de los derechos de la mujer. “Tenemos que estar todos juntos en la lucha”, ha animado. También ha actuado durante ha actuado la violinista Carmen Tomé Varela.
Asimismo, la artista visual, fotógrafa y escritora activista, experta en comunicación y género, Yolanda Domínguez Rodríguez, ha advertido, durante su ponencia, sobre la violencia estructural.
También ha invitado a reflexionar sobre si la cultura visual ha cambiado con respecto al estereotipo de la mujer, algo que ha lamentado que ha ido “a peor”.
“Tenemos que ser exigentes con los cambios”, ha conminado. Ha puesto el ejemplo de los juguetes, sobre todo las muñecas, que incluye mayor diversidad racial, pero están “hipersexualizadas”.
A su juicio, parecen que visten de modernidad “las mismas cosas de siempre”, se ha quejado. Con todo, ha opinado que el relato no ha cambiado. En el mundo de la moda, “se muestran cuerpos derrotados”.
Por otro lado, ha considerado que no todo lo que hace la mujer es feminista ni empoderante, a lo que ha señalado que se siguen siendo valoradas por su cuerpo, por su capacidad de seducir. Por otro lado, cree que se está asociando el poder de la mujer a hacer lo que hacían los hombres. Se ha preguntado, en este sentido, “si nos vamos a quedar en eso”. Para ella, hace falta más formación, aunque ha recalcado que hay “esperanza” para la igualdad.
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