ZARAGOZA, 9 (EUROPA PRESS)
Las dos oleadas de altas temperaturas que ha registrado la comunidad autónoma hasta julio han impactado en la asistencia urgente y en la mortalidad, según los datos obtenidos de la primera evaluación del Plan de Vigilancia de los Efectos del Exceso de Temperaturas sobre la Salud en Aragón, elaborado por la Dirección General de Salud Pública del Departamento de Sanidad.
El estudio comprende el periodo del 1 de junio al 31 de julio y en él se han analizado las temperaturas registradas, las urgencias hospitalarias, la actividad del 061 y la mortalidad, ha informado del Departamento de Sanidad del Ejecutivo aragonés.
En cuanto a las temperaturas, los criterios de Salud Pública se basan en los umbrales establecidos para cada provincia a partir de los cuales se considera que hay afecciones para la salud de las personas, en Huesca, con una máxima 34 grados Centígrados y 20 de mínima; en Teruel, de 36 y 17; y en Zaragoza, de 36 y 20.
El documento ha constatado que en estas nueve semanas se han superado las series históricas de temperaturas medias en un elevado porcentaje de días y los umbrales de disparo de mortalidad, especialmente, durante las olas de calor sufridas en las tres capitales de provincia durante la semana del 13 al 19 de junio y del 11 al 24 de julio.
De este modo, se observa un aumento de las temperaturas máximas respecto al promedio de los 15 años anteriores en los meses de junio y julio, de entre 3 y 5 grados en Zaragoza, Huesca y Teruel. Destaca sobre todo la semana del 13 al 19 de junio, fechas en las que esta diferencia diaria superó en más de 10 grados los valores promedio de la temperatura máxima de la década y media anterior.
El Departamento de Sanidad también ha señalado el número de días consecutivos en los que se ha registrado este fenómeno. Así, se han superado umbrales de temperatura máxima y mínima de disparo de mortalidad durante 15 días en Huesca, 22 días en Zaragoza y 4 días en Teruel.
AUMENTO DE LAS ATENCIONES EN URGENCIAS
Estos incrementos coinciden con un mayor registro de urgencias. En los hospitales, los valores se acercan a los de temporadas previas a la pandemia de la COVID-19, con cifras en torno a las 9.500 asistencias semanales, excepto un notable ascenso en la semana del 20 al 26 de junio, cuando se registraron casi 11.000 urgencias.
Además, del 1 de junio al 31 de julio, se han notificado 135 atenciones en urgencias hospitalarias de patologías específicamente relacionadas con las altas temperaturas frente a las 49 del mismo periodo de 2021, aunque son datos similares a las 139 de 2019. Asimismo, se han registrado durante el mes de julio ocho ingresos hospitalarios por esta causa, de los cuales siete fueron hombres y una mujer.
De estos diagnósticos, 85 se han producido como consecuencia de golpes de calor o insolaciones, 30 se han diagnosticado como síncope de calor, nueve agotamientos por calor, cinco por fatiga y el resto, por diferentes patologías, como edemas o calambres.
Las urgencias atendidas por el 061, al igual que en las temporadas 2020 y 2021, han estado muy por encima de los límites esperados, con un pico registrado entre el 18 y el 24 de julio, con 4.123 asistencias semanales frente a las 2.800 de media de los siete años anteriores.
VIGILANCIA DE LA MORTALIDAD
Respecto a la mortalidad, en siete de las nueve semanas de vigilancia en Zaragoza, ha estado por encima del umbral esperado en todas las edades y durante seis semanas también en mayores de 64 años, unos datos que indican que el número de defunciones aumenta durante las temporadas de calor.
Por ejemplo, en la capital aragonesa, la mortalidad se ha disparado en entre los mayores de 64 años en la semana del 18 al 24 de julio, con 188 fallecimientos frente a los 115 de media de los últimos siete años. En Teruel, por su parte se han registrado 22 fallecimientos frente a la media de 12 y lo mismo ha sucedido en Huesca, en la semana del 20 al 26 de junio, con 18 muertes de personas de más de esta edad frente a las 12 de media.
La Dirección General de Salud Pública ha activado en junio el Plan de acción para la prevención de los efectos de las temperaturas extremas sobre la salud en Aragón, que se extenderá hasta el próximo 15 de septiembre.
El plan tiene como objetivos prever posibles problemas para la salud de los ciudadanos relacionados con las situaciones de calor extremo y medir las consecuencias de estos hechos para la salud de la población. Esta iniciativa cuenta con la colaboración de varios departamentos, instituciones y organizaciones y se realiza en coordinación con el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
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