TERUEL, 26 (EUROPA PRESS)
La Fundación Santa María de Albarracín ha terminado la restauración del lateral derecho de la Escalinata que da acceso al Paseo del Óvalo de la ciudad de Teruel, próxima a la estación ferroviaria. La Fundación Térvalis, patrona de la Santa María, financia esta actuación, que comenzó el año pasado y concluirá en 2026.
Así lo ha indicado a Europa Press el gerente de la Fundación Santa María, Antonio Jiménez, quien dirige la restauración, aunque sobre el terreno se encuentra la directora del Centro de Restauración de esta fundación, Rosana Serrano. Un total de seis expertos han reparado los efectos del paso del tiempo en el lateral derecho de la escalinata.
Esta es la segunda fase de la restauración y se ha centrado, desde el pasado mes de julio hasta diciembre, en el paño de la barandilla que da al IES ‘Valle del Turia’. “Todo este frente se ha acabado”, ha explicado Jiménez, añadiendo que la intervención ha alcanzado, por debajo de la escalinata, hasta el extremo izquierdo.
HUMEDADES
El problema central han sido las humedades, ha continuado el gerente de la Fundación Santa María. “La escalinata ha recibido muchísima humedad de aguas residuales, como una esponja, y se encontraba en un estado muy agravado, especialmente el entorno del túnel” que desemboca en la Delegación Territorial del Gobierno de Aragón en Teruel, con capas de carbonatos de hasta un centímetro y medio, en torno a los ladrillos.
“Hay un problema serio de humectación, pero en paralelo hay más elementos, como la vegetación, porque parecía un jardín vertical” con plantas que soportaban los contrastes térmicos “y contribuían al deterioro”.
En el túnel hay “un potente encofrado de hormigón, cosa que está bien para sujetar la escalera”, pero “lo que hace es interrumpir la porosidad de la escalinata y de ahí sale más fluyente la humedad”. En las junturas de de las piedras y los ladrillos había cemento, “que no transpira con facilidad” y se ha colocado en su lugar mortero de cal “muy similar al original”, lo que “da una continuidad en la presencia muy buena”.
“Los ladrillos estaban blancos, eran como masas blancas continuas, con espesores serios, y se hizo una prueba con láser, pero no funcionaba porque era muy lento, y por el sistema tradicional va mucho más rápido”.
En total se han restaurado en esta fase unos 300 metros cuadrados, “es como restaurar un retablo de 300 metros”, ha continuado Antonio Jiménez, apuntando que se han repuesto en torno a 300 piezas de decoración, el 65 por ciento, cerámicas verdes y marrones, tejas, decoraciones geométricas a modo de platos, flechas y cenefas, que para esta actuación ha elaborado el ceramista turolense Laureano Cruzado.
LA FUENTE, PENDIENTE
Tras esta intervención, quedan pendientes de restaurar el lateral izquierdo y la fuente con el bajorrelieve de los Amantes de Teruel, que recuperó el Ayuntamiento, así como reparar los daños en los peldaños, tales como fisuras, “un remiendo interior de la escalinata”, ha comentado Jiménez.
La Fundación Térvalis invirtió 180.000 euros en la primera fase y otros 200.000 en la que ahora ha concluido, y el lateral izquierdo costará también 200.000 euros, ha subrayado Antonio Jiménez.
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