ZARAGOZA, 13 (EUROPA PRESS)
La eurodiputada aragonesa Isabel García (PSOE) ha llevado este martes al Pleno del Parlamento Europeo los incendios forestales ocurridos este verano en Ateca y Añón del Moncayo (Zaragoza). Ha propuesto reforzar los mecanismos europeos actuales para afrontar las consecuencias del cambio climático y evitar nuevas catástrofes.
El Parlamento Europeo ha analizado este martes en sesión plenaria cómo reforzar la acción de la UE para combatir el cambio climático. Un debate que nace de la preocupación ante el aumento de episodios extremos y desastres naturales de estos años.
Durante la sesión se ha preguntado a la Comisión y al Consejo Europeo por las ayudas a las autoridades nacionales y regionales, incluida la activación del Mecanismo de la UE de protección civil, tras las graves sequías y fuegos que han golpeado a varios Estados miembros en los últimos meses.
En España se han registrado hasta 63 grandes incendios que superaron las 295.000 hectáreas quemadas. Dos de los más virulentos tuvieron lugar en Ateca y Añón de Moncayo en la provincia de Zaragoza.
Precisamente, Isabel García ha intervenido en la Eurocámara para referirse a estas catástrofes que han supuesto “pérdidas incalculables”: “ciudadanos desplazados de sus casas, daños irreparables en la agricultura, ganadería e infraestructuras, pérdida de biodiversidad y erosión del suelo. Sin olvidarnos de los profesionales que han trabajado sin descanso para sofocar las llamas arriesgando sus vidas”.
El Parlamento ha desempeñado un papel importante en la promoción de una legislación climática más ambiciosa para la UE y declaró una emergencia climática el 28 de noviembre de 2019.
Sin embargo, la eurodiputada ha insistido en la necesidad de seguir avanzando, ya que “los instrumentos de financiación y coordinación con los que contamos en Europa para abordar estas catástrofes no se adaptan a la gravedad y a la intensidad de los desastres naturales de los últimos años”.
García ha afirmado que el Mecanismo de Protección de la Unión y el Fondo de Solidaridad, creados hace 20 años “fueron un acierto europeo, pero se quedan cortos ante la realidad de la emergencia climática mundial”. En este sentido, ha instado a la Comisión a reforzarlos y aumentar el presupuesto “en beneficio del planeta y de la ciudadanía”.
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