HUESCA, 10 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Huesca derribará la vivienda del poblado del Camino de Jara incendiada el pasado fin de semana y ha puesto el foco en el resto de las viviendas que allí se ubican por la probabilidad de que pueda ocurrir lo mismo en cualquiera de ellas.
El pasado día 6 de enero, se incendió una vivienda de este poblado en la que vivía un matrimonio y sus seis hijos. El fuego no causó daños personales y la familia fue realojada en un hostal.
La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, ha apuntado que el “chabolismo” es un tema que preocupa en el Ayuntamiento. “Esas viviendas tienen cierta precariedad y nos preocupa ahora mismo el estado del resto de viviendas porque somos conscientes de que este tipo de accidentes pueden ocurrir en el futuro y allí viven aproximadamente unas 80 personas”, ha manifestado.
En este sentido, ha señalado que la vivienda que resultó afectada será derribada. “Hay un convenio con el Gobierno de Aragón en esta materia, ya que siempre que se encuentre una deficiencia estructural o técnicas en unas viviendas precarias que pudieran incurrir en un problema de salud para los habitantes y más sabiendo que hay niños, el ayuntamiento de oficio puede actuar y esta vivienda incendiada tendremos que tirarla para que no se vuelva a habitar porque no cumple las condiciones”, ha aseverado.
Además, ha apuntado que los Servicios Sociales están revisando las viviendas municipales con las que cuenta el Consistorio al objeto de que las familias que viven en el poblado del Camino de Jara, entorno a unas 80 personas, puedan ir trasladando poco a poco su vivienda a un lugar en mejores condiciones.
“Estamos viendo esas viviendas e insistir en que poco a poco deberíamos trasladar su vivienda y vivir en mejores condiciones, aunque es complicado porque esas personas a veces no quieren abandonar su hogar”, ha concluido.
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