TERUEL, 11 (EUROPA PRESS)
La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha mantenido un nuevo encuentro este martes con la junta directiva de la Asociación de Vecinos del Carrel para perfilar los últimos detalles del futuro centro social de este barrio de la ciudad.
La alcaldesa, acompañada del concejal de Infraestructuras, Juan Carlos Cruzado y la concejal de Servicios Sociales, Carmen Romero, han entregado el plano de la futura sede social a la presidenta del Carrel, Marisa Garzarán y a Diego Torres, miembro de la junta.
En el local han estado comprobando la ubicación y la distribución de cada una de las distintas dependencias que tendrá el centro. Han quedado en el aire algunos pequeños flecos como el material que se elegirá para cubrir el suelo del local porque antes de tomar una decisión en firme la presidenta prefiere consultarlo con los miembros de la Asociación para decidir si es mejor un suelo cerámico, más resistente a golpes y al agua, o uno laminado, que es más confortable y mejor conductor de calor.
En el centro se van a instalar tabiques móviles modulares para reducir o ampliar los espacios en función de la actividad que se desarrolle.
El local, de 225 metros cuadrados y de una única planta situado en el número 20 de la Calle Carrel, tendrá un despacho en la parte izquierda de la entrada donde se abrirá una ventana a la calle para que entre luz natural.
También se van a construir dos aseos, uno de ellos adaptado para personas con movilidad reducida, y una sala que servirá de almacén. El resto del espacio podrá fraccionarse para desarrollar de forma paralela diferentes actividades deportivas, culturales ó lúdicas.
“La transparencia y el diálogo con los turolenses es la seña de identidad de nuestro equipo de Gobierno y por eso nos hemos reunimos reiteradamente con los vecinos del Carrel que pidieron al Ayuntamiento tener unas instalaciones dignas para poder desarrollar sus actividades y las van a tener muy pronto”, ha declarado la alcaldesa tras la reunión.
El Ayuntamiento de Teruel adquirió un local en el Carrel por un importe de 120.000 euros para cederlo a la Asociación de Vecinos de este popular barrio turolense. Con esta nueva sede, el Consistorio apuesta por un espacio público dirigido a proyectos sociales que contribuyen a la dinamización del barrio al tiempo que se le da uso a locales revalorizando también una de las áreas más tradicionales de la ciudad que se encuentra a tan sólo cinco minutos del centro histórico y que, a su vez, tiene la ventaja de estar enclavada en plena naturaleza.
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