ZARAGOZA, 29 (EUROPA PRESS)
Con la llegada de los meses de calor, de las noches eternas y de los días a la sombra sin separarse del abanico, Aragón te ofrece un refugio fresco, con pueblos encantadores de día y donde dormir tapado de noche, además de Fiestas de Interés Turístico donde celebrar y, a la vez, disfrutar de manjares gastronómicos como la Longaniza de Graus o el Jamón de Teruel.
Los paisajes naturales de Aragón te esperan en estos tórridos meses con temperaturas suaves e interesantísimas actividades para realizar en familia, con una gama de colores verdes que sorprenden al visitante, desde el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, hasta el refrescante nacimiento del río Pitarque, pasando por la meca del barranquismo en Guara.
Declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido incluye un conjunto de cuatro valles –Ordesa, Añisclo, Escuaín y Pineta– que se extienden como brazos alrededor del Monte Perdido, el macizo calcáreo más alto de Europa.
El valle de Ordesa es el alma del parque, con unos senderos en los que fundirse con el entorno a los que llegan miles de personas de todo el mundo en cualquier época del año. Una de las excursiones más populares es la que lleva hasta la cascada de la Cola de Caballo, todo un clásico, ya que a su belleza se añade una facilidad que la hace apta para todos los públicos.
El de Escuaín es probablemente el menos transitado, pero la belleza de sus gargantas y la facilidad para observar aves protegidas merece su visita, mientras que el apacible y bucólico valle de Pineta destaca por sus poderosas crestas y sus boscosas laderas.
La Comunidad tiene 18 espacios naturales únicos, con una enorme diferencia de paisajes y de biodiversidad. Para recorrerlos, sólo hay que dejarse guiar por la completa señalización de la Red de Senderos de Aragón, con más de 4.000 kilómetros señalizados para recorrer a pie, en BTT o en 4×4, además de actividades guiadas y acompañadas para convertir el viaje en una experiencia.
Además, Aragón está repleta de pueblos “encantadores de día” y donde descansar “a la fresca” por la noche en su red de establecimientos de turismo rural o en su Red de Hospederías, situadas en edificios históricos de gran belleza.
Son cientos los pequeños pueblos pintorescos llenos de historia y elementos sorprendentes. Como Ansó (Huesca), con sus chimeneas troncocónicas cubiertas con piedras para que no entren las brujas. Daroca (Zaragoza) y sus monumentales puertas de entrada con la muralla más extensa de Aragón. O La Fresneda (Teruel), con sus cárceles destinadas a distintos estratos sociales. Cada zona tiene su encanto y sus peculiaridades que las convierten en únicas, con cientos de experiencias y paisaje naturales.
ESTACIONES ABIERTAS EN CERLER Y PANTICOSA
Por otro lado, aunque la nieve de las cumbres ya se haya derretido hace semanas, los centros de esquí y de montaña estarán abiertos también este verano, con programas como ‘Conviértete en Montañero’ en Cerler, entorno a parajes como el Pico Cogulla, el mirador de Rincón del Cielo y el collado de Sarrau; o actividades en los ibones de Asnos y Sabocos en Panticosa. Se trata de excursiones sencillas en las que quienes se acerquen a las estaciones de Aramón podrán descubrir estos lugares de la mano de un guía de montaña.
‘Conviértete en Montañero’ pretende acercar estos parajes a los visitantes con menos experiencia de una forma segura, si bien también es una actividad atractiva para aquellos que, habiendo dado ya sus primeros pasos de senderismo, quieran conocer un poco más de la flora y fauna de estas montañas.
La experiencia es gratuita para quienes adquieran el ticket de la telecabina de Panticosa o del telesilla El Molino de Cerler, y sólo es necesario apuntarse antes de comenzar hasta completar aforo.
Para los más pequeños, repite un año más el programa ‘Pequeños Gigantes en Cerler’, unos divertidos talleres de iniciación al montañismo y la naturaleza para promover la afición a la montaña.
Además de las actividades organizadas en torno a las estaciones de esquí, los visitantes pueden optar también por realizar excursiones libres en estos parajes, descensos de BTT, recorridos de ‘trail running’, disfrutar del viaje panorámico en remonte o una buena parrillada al pie de alguno de los picos más altos del Pirineo.
En cuanto al Valle de Tena, todo esto será un complemento para el conjunto de actividades programadas en esta zona a lo largo del verano: eventos culturales como Pirineos Sur o el Festival Tocando el Cielo; y deportivos como la Trail Valle de Tena, la Aneto-Posets o una prueba de Copa de Europa de DHI –‘Downhill’, descenso– en Panticosa.
En el pasado, Panticosa fue sede de una Copa del Mundo de descenso en 1996 y ha acogido varias pruebas de la Copa de España y el Campeonato de España. La celebración de la IXS European Downhill Cup en Panticosa es sólo el primer paso en la estrategia de promoción de la localidad como destino internacional de ‘mountain bike’, especialmente del descenso.
DÍA DE LA LONGANIZA DE GRAUS
El verano en los pueblos aragoneses es sinónimo de verbena y de fiestas patronales, y muchas de estas celebraciones no se pueden separar de su gastronomía.
Es el caso de la localidad altoaragonesa de Graus, que celebra desde hace 33 años el Día de la Longaniza, Fiesta de Interés Turístico Aragonés, el 27 de julio.
Aunque la longaniza de Graus sea ahora famosa por ser el embutido preferido de la modelo e ‘influencer’ Georgina Rodríguez, que creció a no muchos kilómetros –en Jaca–, este elaborado cárnico tiene millones de fans y muchos de ellos se reunirán el 27 de julio en torno a una fiesta llena de buenos aromas y sabores.
Además, la longaniza y la música puede ser la excusa perfecta para descubrir la plaza renacentista de Graus, sus sorprendentes pinturas murales y la rivalidad entre las distintas familias en la decoración de sus fachadas, lo que la convierten en una de las más bellas de Aragón.
LA VAQUILLA DE TERUEL
Y, como del cerdo se aprovecha todo, quien prefiera celebrar con un buen Jamón Denominación de Origen Teruel tiene la oportunidad en las Fiestas del Ángel, declaradas de Interés Turístico Nacional, que comenzaron el 27 de junio y terminarán el 8 de julio.
Estas multitudinarias fiestas son una exaltación de la alegría, de la calle y, por supuesto, del toro. Su momento álgido es cuando todos los vaquilleros –peñistas– le ponen el pañuelo al Torico, símbolo de la ciudad.
La particularidad de estas fiestas es que todo el mundo puede sentirse peñista, es sumamente inclusiva. Sólo hay que vestirse de blanco con una faja roja.
Además, las 19 peñas de Teruel están abiertas de forma gratuita a todos, peñistas y visitantes, con actuaciones, verbenas, teatro o actuaciones para niños: de todo, todo el día y siempre en la calle.
Los toros ensogados, tan típicos de la capital turolense, también recorren las calles de la ciudad como uno de los espectáculos preferidos de los vaquilleros.
FESTIVALES DE LOS CASTILLOS
Otro de los planes refrescantes para este verano lleva de vuelta a la Edad Media con los Festivales de los Castillos, con un marco incomparable, el de los castillos en los que se escribió la historia de Aragón, que se llenarán de oferta cultural con música, teatro, danza, humor y magia.
Así, la cita comenzará en el Castillo de Grisel –del 6 de julio al 3 de agosto– y recalará el 12 y 13 de julio en el Castillo del Papa Luna de Illueca y en el de Alfajarín. El 13 y 14 de julio será el turno de Añón de Moncayo.
El resto de castillos participantes son los de Mesones de Isuela –19 y 20 de julio–, Jarque de Moncayo –26 y 27 de julio–, Valderrobres –3 y 4 de agosto–, San Agustín –25 de agosto–, Sádaba –9 de agosto–, Novallas –20 y 21 de julio–, Albalate del Arzobispo –15 al 17 de agosto– y Fraga –20 de agosto al 1 de septiembre–.
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