AÍNSA (HUESCA), 30 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Aínsa ha concluido las obras de acondicionamiento de acceso peatonal y de bicicletas a la zona deportiva y cultural del pueblo, en las que ha invertido alrededor de 40.000 euros procedentes de fondos europeos, para favorecer el tránsito de manera segura.
Con ello, se impulsa un entorno de “vital importancia” para los habitantes tanto del municipio como del resto de la comarca, al albergar el ‘pumptrack’, el campo de fútbol, la piscina de verano, el polideportivo, el centro cultural, la escuela de música, la escuela de adultos y la biblioteca.
En concreto, se ha acondicionado el acceso peatonal y de bicicletas al pumptrack y al campo de fútbol de Aínsa, cuya subvención ha ascendido a 20.000 euros.
La misma cantidad se ha destinado al acondicionamiento de los accesos al polideportivo y a la piscina municipal, que ha consistido en ambos casos en la construcción de aceras y en la instalación de bolardos para garantizar la seguridad de los transeúntes.
“Eran unas intervenciones muy necesarias y demandadas por la población ya que en pocos años este espacio deportivo-cultural se ha convertido en punto de encuentro prioritario para personas de todas las edades y aficiones”, ha explicado el alcalde, Enrique Pueyo.
El ‘pumptrack’ de Aínsa, de reciente construcción gracias al proyecto transfronterizo Poctefa-Dusal, y la finalización de las obras en la Escuela de Música y Danza José María Campo a comienzos de año, han supuesto un incremento notable de afluencia en esta parte del pueblo, suponiendo un riesgo la carencia de aceras y elementos para la prevención de accidentes.
Las actuaciones forman parte de dos proyectos financiados en la convocatoria de ayudas de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, para la realización de acciones destinadas a la promoción de estilos de vida saludable, que deben estar enfocadas en la creación o la rehabilitación de entornos que, como en el caso de Aínsa, prevengan el sedentarismo de la población.
“Además de la seguridad, queríamos favorecer el acceso de los usuarios a pie o en bicicleta creando un recorrido alternativo. De esta manera incidimos también en la mejora de la calidad de vida de los vecinos invitándoles a tener una vida activa y disfrutando en sus momentos de ocio de menos ruido y contaminación”, ha apuntado el alcalde.
Se calcula que por la zona deportivo-cultural de Aínsa pasan al año más de 10.000 usuarios, unas cifras que se doblan en verano con la apertura de la piscina municipal, las vacaciones y aumento del turismo.
- Te recomendamos -