SEVILLA, 12 (EUROPA PRESS)
Ante la “propuesta provisional” elaborada por el Ayuntamiento hispalense, para delimitar una Zona de Bajas Emisiones en la Cartuja, impidiendo la circulación de vehículos de gasolina matriculados antes del año 2000 y diésel anteriores a 2006, considerados “los más contaminantes”, la portavoz municipal de Vox, Cristina Peláez, ha advertido este viernes de que la medida, actualmente en fase de alegaciones, “discriminará a los trabajadores del parque tecnológico y a los sevillanos en general”.
Mientras el Ayuntamiento sostiene que la medida, amparada en la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética y los “compromisos internacionales asumidos por la capital hispalense en la lucha contra el cambio climático”, se dirige contra “los vehículos más contaminantes, que tendrán alternativas de aparcamiento en el perímetro de Cartuja”, Peláez ha considerado que con este plan, “Sevilla retrocederá en el tiempo”.
En un contexto en el que la medida se dirige a los vehículos de gasolina matriculados antes del año 2000 y los diésel anteriores al año 2006, Peláez opina que esta restricción “convierte en inaccesible buena parte de la Cartuja para una mayoría de sevillanos, ese nutrido grupo de personas, trabajadores y familias, que no disponen de un coche moderno, y que no han podido adquirir un coche eléctrico o híbrido”.
“El delirio ecologista, las imposiciones de la religión climática, el globalismo que todos los grupos municipales siguen a pié juntillas creará muy pronto una nueva fractura social en Sevilla. La Cartuja, a la que se aplicarán restricciones propias de zonas altamente contaminadas cuando la situación es justo la contraria, quedará reservada para las élites, mientras que los trabajadores que a diario se trasladan a la zona tendrán que buscarse la vida para trasladarse a sus centros de trabajo a través del transporte público, muy deficiente en La Cartuja, o verse abocados a adquirir un vehículo nuevo o eléctrico”, ha opinado, mientras el Consistorio ha prometido reforzar las conexiones por bus con la Cartuja, mediante una nueva línea.
Cristina Peláez ha apostillado que, a su entender, “el PSOE es especialista en complicar la vida a los sevillanos, alejados como están de la realidad social y económica, de espaldas a trabajadores, autónomos y pequeños empresarios y por supuesto contra las familias”.
“Mientras no se articule una alternativa real y barata de transporte público, este proyecto debería quedar en un cajón, como otros muchos proyectos que son realmente necesarios para Sevilla, como la red completa de metro o la ampliación y los túneles de la SE-40 que ningún Gobierno ha sido capaz de desarrollar”, toda vez que la Junta prevé comenzar en 2023 las obras del ramal técnico del tramo norte de la futura línea tres del metro y el Estado prevé tener antes de final de año el nuevo estudio informativo destinado a decidir si mantener los túneles del proyecto del paso sur de la autovía SE-40 pero ampliando sus trazados, o sustituirlos por puentes esgrimiendo los niveles freáticos del terreno, si bien el proyecto acumula lustros y lustros de retraso.
Tras la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) de dicha “propuesta provisional” elaborada por el Ayuntamiento hispalense, para delimitar una Zona de Bajas Emisiones en la Cartuja, para su consulta y alegaciones, Peláez ha dicho que “el Gobierno de Antonio Muñoz debería justificar esta decisión con la transparencia que requiere un proyecto discriminatorio para los sevillanos, y podría empezar aportando los informes donde se indique la mala calidad del aire en la Cartuja o la superación de los niveles de emisiones en la zona, donde no existe actividad industrial”.
“Esperamos de Muñoz, además, que aporte datos sobre el coste que tendrá la aplicación de la Zona de Bajas Emisiones y del impacto económico que sufrirán las empresas asentadas en La Cartuja”, ha concluido.
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