SEVILLA, 27 (EUROPA PRESS)
Un jurado popular enjuiciará a partir de este lunes 28 de noviembre en la Audiencia de Sevilla al hombre acusado de asesinar en febrero de 2020 a su hermano tras dispararle presuntamente con una escopeta en un paraje de la localidad de Los Palacios y Villafranca, hechos por los que la Fiscalía reclama para el encausado un total de 22 años y nueve meses de cárcel.
Este juicio fue señalado inicialmente para el pasado día 1 de julio, pero entonces tuvo que ser suspendido debido a la ausencia de un testigo de los hechos, de forma que fue nuevamente para este próximo 28 de noviembre, cuando tendrán lugar la constitución del jurado popular, la presentación de las alegaciones previas por las partes personadas en este procedimiento y la declaración del acusado, tras lo que al día siguiente, el martes 29 de noviembre, comparecerán testigos y peritos.
En su escrito de acusación, el Ministerio Público reclama para el investigado, identificado como V.C.V., un total de 22 años de prisión por un delito de asesinato y nueve meses de cárcel por un delito de tenencia de armas careciendo de permiso o licencia, así como que, en concepto de responsabilidad civil, indemnice con 20.000 euros a los diez hijos de la víctima.
La Fiscalía relata en su escrito de acusación que los hechos se produjeron sobre las 21,30 horas del día 7 de febrero de 2020, cuando el encausado se dirigió conduciendo un vehículo a una zona de Los Palacios donde se encontraba su hermano en compañía de uno de sus hijos y, una vez allí, “sin apearse del vehículo, guiado por el ánimo de acabar con la vida” de la víctima “y de forma sorpresiva”, sacó una escopeta por la ventanilla del copiloto y le disparó “sin darle posibilidad de defensa alguna”.
Como consecuencia de esta agresión, el varón falleció, según indica el Ministerio Público, que recuerda que el encausado se encuentra en prisión provisional por esta causa desde el día 10 de febrero de 2020.
Tras ello, y según el relato de la Fiscalía, el acusado se bajó del coche y se dirigió al hijo del fallecido para decirle “¿quieres tú otro?”, marchándose a continuación a bordo del vehículo en el que había llegado al lugar de los hechos. El acusado carecía a la fecha de los hechos de licencia o permiso de armas.
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