
SEVILLA, 20 (EUROPA PRESS)
El servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha puesto en marcha la tercera edición de su curso de simulación en emergencias obstétricas. La iniciativa está dirigida a todos los perfiles profesionales que componen dicho servicio clínico: un total de 84 profesionales entre médicos especialistas, matronas, enfermeras, TCAE y residentes.
La formación busca reforzar la adquisición de habilidades y conocimientos que mejoren la respuesta ante situaciones críticas en el ámbito obstétrico. Esta edición, además de las complicaciones propias del embarazo y el parto abordadas en ediciones precedentes, ha incorporado una situación crítica de parada cardiorrespiratoria, señala el centro en un comunicado.
El curso se lleva a cabo en el marco de una simulación realista de emergencias constando de siete sesiones que dieron comienzo este mes de marzo y finalizarán en abril. Los profesionales están siendo formados en situaciones críticas, trabajando en sus equipos naturales de trabajo y en el mismo lugar en el que desarrollan su labor asistencial diaria.
La formación está centrada en la valoración ABCDE recomendada por la ‘European Resuscitation Council’, con la colaboración especial del anestesista y jefe de la Unidad de Dolor Crónico del Hospital de Valme, Ángel Martínez. Un experto en resucitación cardiopulmonar que es quien está liderando la parte de la formación dedicada a la reanimación.
APUESTA POR LA MEJORA DE LA CALIDAD ASISTENCIAL
El paro cardíaco ocurre cuando el corazón deja de latir de forma repentina. Cuando esto sucede, también se detiene el suministro de sangre al cerebro y partes del cuerpo, por lo que, si no se actúa en pocos minutos, podría llevar a la muerte. No es una situación frecuente en embarazadas, pero el abordaje de la formación en este tipo de escenarios vitales por parte de equipos profesionales implicados en su atención favorece respuestas ágiles, coordinadas y seguras.
Al respecto, la jefa del servicio de Ginecología y Obstetricia del hospital sevillano, Rosa Ostos, concibe la iniciativa como “una apuesta clara por la mejora de la calidad asistencial: nos enfrentamos a situaciones críticas poco frecuentes, pero que requieren de una actuación diligente; de ahí que la formación en equipo permita automatizar los procedimientos y mejorar la comunicación interna, lo cual es crucial para salvar vidas”.
Por su parte, la supervisora de Paritorio, María Román, también ha agradecido el apoyo y esfuerzo para garantizar la participación del equipo de profesionales en este tipo de formaciones “pone en valor el compromiso continuo del equipo de Obstetricia y Ginecología con la mejora de la calidad asistencial y la seguridad de las pacientes”.
Por lo que se refiere a los docentes, se trata de instructores del propio centro, altamente experimentados. El equipo de instructores está conformado por las ginecólogas Carlota Borrero, Laura Castro y Myriam Sandino; las matronas Katia Suárez y Jorge Romero, quienes, junto al Dr. Ángel Martínez, garantizan que los profesionales reciban la formación más actualizada y precisa.
CONSOLIDACIÓN DEL PROYECTO
Este curso se integra en un ambicioso Proyecto de Simulación en Emergencias Obstétricas que, desde hace dos años, está llevando a cabo el servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital de Valme.
Su objetivo es perfeccionar conocimientos y habilidades en la atención a las gestantes ante situaciones de alto riesgo y poco frecuentes, cuya coordinación para la toma de decisiones contribuye a optimizar los resultados maternofetales.
Esta iniciativa está concebida con entidad de programa de formación, dado que va más allá de cursos aislados en el tiempo y sin continuidad. De tal modo que hay una programación anual con contenidos diferentes correspondientes a escenarios obstétricos críticos diversos.
En este sentido, ya se han abordado con anterioridad dos escenarios críticos como son hemorragia obstétrica y la distocia de hombros. Este tipo de formación aporta como principales novedades: la simulación clínica como herramienta pedagógica, la participación de equipos de trabajo multidisciplinares (obstetras, matronas, anestesistas, enfermería y residentes) y su realización en un entorno tan real como el propio paritorio.
Por su parte, los instructores destacan la aportación de estos cursos a la práctica clínica por su condición de formar a equipos naturales de trabajo: “al formarte en equipo se automatizan las actuaciones y la comunicación dentro del equipo, la transferencia de conocimientos y habilidades es de una adquisición máxima”. En concreto, se formarán seis equipos completos de matronas, TCAE, ginecólogos, obstetras y residentes.
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