Una fuerte ola de calor se está haciendo notar durante los últimos días en la Península, y he llegado para quedarse, confirmando su primera víctima mortal.
Un agricultor de 47 años perdió la vida el pasado sábado en Aznalcóllar (Sevilla) a causa de un golpe de calor sufrido mientras trabajaba en la labranza de un terreno.
Según la Consejería de Salud, el hombre fue atendido tras desvanecerse en el sembrado y se indicó que tenía patologías previas. Luego de perder el conocimiento, sus hijos lo llevaron al centro de salud de la localidad alrededor de las 13:00 horas, presentando una fiebre de aproximadamente 41 grados, según fuentes municipales.
Lamentablemente, el hombre no pudo ser reanimado y falleció en el centro de salud. El domingo, sus restos fueron incinerados.
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