TOMARES (SEVILLA), 9 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Tomares (Sevilla) ha instalado el sexto paso peatonal en el municipio, con lo que continúa acercándose a su proyecto de ‘Smart City’ (Ciudad Inteligente) “de las principales ciudades del mundo, como Nueva York, Nueva Jersey, Tokio o Singapur”. La localidad, que fue pionero en la provincia y uno de los primeros de España en 2019 en contar con el primer paso de cebra inteligente, cuenta ya con su sexto paso peatonal iluminado o tridimensional.
El acalde de Tomares, José María Soriano, y el concejal de Transformación Digital, Desarrollo Local y Comercio del Ayuntamiento de Tomares, Eloy Carmona, han visitado el nuevo paso peatonal inteligente que se ha colocado en la avenida del Aljarafe, junto a la Glorieta El Garrotal, en Aljamar, zona comercial y de hostelería de gran afluencia de tráfico y de peatones, con el objetivo de seguir reforzando la seguridad vial, tal como detalla el Consistorio en una nota de prensa.
La iniciativa puesta en marcha por el Ayuntamiento de Tomares, a través de sus concejalías de Urbanismo, Desarrollo Económico, Comercio y Transformación Digital, se enmarca dentro del Plan Actúa, Programa de Municipios Inteligentes (Soluciones de Movilidad y control de Tráfico, Pasos de Peatones Inteligentes) de Diputación de Sevilla.
Con éste, son ya seis los pasos de cebra inteligentes que se han instalado en la localidad, que cuenta con dos en la calle Alameda de Santa Eufemia –uno de ellos próximo a la Glorieta del Bombita–, otro en la calle Josefa Cotillo Martínez ‘La Polaca’, justo a la salida de la Glorieta El Garrotal en dirección Bormujos, un cuarto en la calle Rafael Alberti, que da acceso al Centro Comercial La Cartuja, y un quinto en la calle La Solana que comunica con el área del Rocódromo y el Complejo Polideportivo Miguel Ángel Blanco.
Los pasos inteligentes permiten a los conductores visualizar mejor a los peatones, ciclistas o monopatines eléctricos, ya que llevan luces led en los pasos de cebra, tanto en el suelo como en las señales verticales, que se iluminan tanto de día como de noche cuando detectan la presencia cercana de un peatón, alertando a los conductores de su proximidad, sin ser deslumbrados, antes de que crucen el paso peatonal, lo que garantiza la seguridad de los viandantes, previene y reduce accidentes.
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