SEVILLA, 13 (EUROPA PRESS)
El perfil del paciente de Cuidados Paliativos es el de una persona que padece una enfermedad terminal; sin embargo, el Hospital Universitario Virgen Macarena ofrece esta prestación a otro tipo de pacientes con enfermedades severas avanzadas pero que no necesariamente implican un final inminente de la vida. Algunos de ellos son pacientes de enfermedades neurológicas como ELA, respiratorias como EPOC avanzado, o las denominadas raras como es el caso de la Epidermólisis ampollosa conocida como Piel de Mariposa.
La Unidad de Cuidados Paliativos del centro hospitalario ofrece sus servicios avanzados a pacientes cuya patología les acarrea “mucho sufrimiento”. “La intención es que la existencia no se limite a sobrevivir sino a vivir”, ha defendido la Junta en una nota de prensa. El doctor Jaime Boceta, responsable del equipo de soporte de Cuidados Paliativos del hospital sevillano, asegura que “el sufrimiento aparece cuando la amenaza a la integridad supera los recursos de los que se dispone para hacerle frente”.
La “mejor manera de menguar ese sufrimiento”, uno de los principales propósitos de la referida Unidad dependiente del Servicio de Medicina Interna del centro sanitario, se procura, continúa este profesional, “disminuyendo esa amenaza”. Aumentando la consistencia y el número de recursos de los que se dispone, la distancia que existe entre amenaza y recursos decrece, reflexiona.
“Esa amenaza se reduce con un buen control de los síntomas, pero también con el fortalecimiento del amor y el aprecio de la familia y amistades, con el desarrollo de aficiones y la planificación de proyectos a corto plazo. Todas las cosas que dan sentido a vivir”, aduce el doctor Boceta, que en un día como hoy, Día Mundial de los Cuidados Paliativos, incide en la importancia de la formación en Cuidados Paliativos dentro de la Medicina como un recurso transversal, desde Atención Primaria a Hospitalaria.
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