SEVILLA, 31 (EUROPA PRESS)
El área de Seguridad Privada de CSIF Sevilla ha denunciado ante la Inspección de Trabajo a la empresa Prosegur SIS España y a los clubes deportivos Sevilla FC y Real Betis por “la ausencia de evaluación específica de riesgos laborales, la falta de formación y medidas de protección adecuadas y la necesidad de reforzar, con urgencia, los mecanismos de colaboración entre la empresa de seguridad y los mencionados clubes de fútbol”. Así,
Según ha detallado CSIF en una nota de prensa se trata de incumplimientos reiterados del art. 19 Ley de Prevención de Riesgos Laborales (PRL) Formación Específica, 17.2, así como el art. 11 de Coordinación Administrativa. Cada partido o evento deportivo supone “un desafío para los vigilantes de seguridad”, que en deben desempeñar su labor en condiciones que “los exponen a situaciones de alto riesgo”.
En este sentido, la delegada de CSIF Seguridad Privada Sevilla, Ana María Durán, refiere diferentes incidentes recientes que han generado “un clima de miedo e incertidumbre” entre los profesionales implicados en esta labor, “no sólo se enfrentan a riesgos físicos evidentes, también sienten una preocupante falta de respaldo, tanto por parte de la empresa que los contrata, como de las instituciones responsables”. A esto se suma la “aplicación improvisada de protocolos de seguridad, la presión para priorizar la fluidez de los accesos sobre la protección del personal y la ausencia de operativas claras y documentadas”.
En opinión de la delegada de CSIF, “lo más alarmante es que lo hacen sin contar con los equipos de protección necesarios”, como chalecos antitrauma y antipinchazo, cascos o escudos. Estas herramientas, “esenciales para garantizar su integridad física, son especialmente importantes en zonas donde pueden sufrir agresiones o lanzamiento de objetos desde las gradas”, ha añadido.
Por otro lado, Ana María Durán ha detallado que “resulta paradójico que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, como los equipos antidisturbios de la Policía Nacional, no accedan a estas mismas áreas sin el equipo de protección adecuado”. Sin embargo, los vigilantes, “que son los primeros en intervenir, deben hacerlo sin las mismas garantías, lo que los deja en una posición de vulnerabilidad inaceptable”, ha señalado.
La responsable sindical cita como ejemplo el incidente ocurrido el pasado 18 de enero, en el que, al finalizar uno de los partidos referidos en la denuncia de CSIF, un grupo de ultras “increpó a directivos de uno de los clubes denunciados, con serias dificultades para abandonar el recinto”. Esta situación “obligó al personal de seguridad de Prosegur a intervenir para garantizar su salida, ocurriendo incidentes que pusieron en peligro tanto a los directivos, como a los profesionales de seguridad, que se vieron expuestos a situaciones de alto riesgo”. Todo ello, en una zona que, “según su ámbito competencial, no debería haber sido responsabilidad de estos trabajadores”.
La sucesión de hechos como los anteriormente señalados, “que en ningún caso son aislados, sino que forman parte de un contexto de reiteradas deficiencias” en la gestión de la seguridad durante eventos de gran concurrencia, ha llevado a CSIF a solicitar a la Inspección que “exija a las partes denunciadas una evaluación específica de riesgos asociados a eventos multitudinarios, especialmente en situaciones de alta conflictividad”.
CSIF ha subrayado que la falta de coordinación, formación específica y equipos adecuados “agravan los riesgos, tanto para los vigilantes como para el público asistente”. En un contexto en el que la Ley 19/2007 contra la violencia en el deporte busca prevenir y erradicar este tipo de actos, “resulta inaceptable que los vigilantes de seguridad privada sigan expuestos a riesgos sin las garantías mínimas necesarias”.
INCUMPLIMIENTO DEL DEBER EMPRESARIAL
La “falta” de medidas de protección adecuadas “evidencian asimismo un incumplimiento del deber empresarial de garantizar la seguridad y salud de los trabajadores”, conforme a lo dispuesto en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31/1995).
La formación es uno de los soportes “fundamentales” del sistema de gestión en la seguridad y salud del trabajo en cualquier empresa. Para evitar riesgos y situaciones peligrosas, es necesario que los trabajadores conozcan “cuáles son los riesgos de su puesto de trabajo, así como los peligros que tiene la actividad que desarrollan y las actuaciones que sí pueden realizar y aquellas que no pueden realizar”. “Quien no conoce la existencia de un riesgo, no realizará ninguna acción para evitarlo, e inconscientemente, podrá crear, igualmente, situaciones de peligro”, ha afirmado la responsable sindical.
De este modo, ha recordado que el Real Decreto 171/2004 establece que “el empresario principal exigirá a sus empresas contratistas o subcontratistas la acreditación escrita de que sus trabajadores han sido formados de conformidad con lo establecido en el artículo 19 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales”.
Finalmente, han añadido “deficiencias técnicas, que comprometen tanto la seguridad de los vigilantes, como la de los asistentes a los eventos”. Entre otras deficiencias, se encuentran “cámaras de videovigilancia obsoletas, sistemas contraincendios que llevan años sin funcionar y la falta de acceso a herramientas de supervisión; entre ellos, la función ‘Cuídame’, crucial para garantizar la seguridad del personal en turnos nocturnos”. Estas carencias “no solo dificultan el trabajo de los vigilantes, sino que también ponen en riesgo a miles de personas que confían en que los eventos deportivos se desarrollen en un entorno seguro”, han concluido desde CSIF.
- Te recomendamos -