MÁLAGA, 6 (EUROPA PRESS)
El subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, ha criticado la que considera una “falta de compromiso total del Partido Popular y de la Junta de Andalucía con la desaladora de la Axarquía”.
“El PP debería cambiarse el nombre al partido del cinismo, porque es muy cínico exigir a los demás que hagan lo que ellos no han querido hacer”, ha señalado Salas tras las críticas del PP-A al Gobierno este pasado jueves por los “engaños” y el “agravio” con la tramitación de esta desaladora frente a las de Cataluña.
Según el subdelegado, “las desaladoras saldrán adelante a pesar de la falta total de compromiso del PP y de la Junta de Andalucía del PP, porque será gracias a que los regantes hagan el trabajo que la Junta no ha querido hacer”. Por parte del Gobierno de España, ha añadido, “les estamos prestando todo el apoyo posible”.
Salas ha indicado que las desaladoras de Cataluña “van muy avanzadas porque la Generalitat ha cumplido su parte con celeridad en la entrega del anteproyecto, con su evaluación ambiental y la puesta a disposición de los terrenos”.
Mientras, ha asegurado, “el Gobierno de Andalucía le pasó la pelota a los regantes, que son quienes han tenido que hacerse cargo de contratar a una ingeniería para la redacción del anteproyecto y la búsqueda de suelo”. Así, ha explicado que el ministerio “podrá iniciar la evaluación ambiental cuando los reciba”.
“Es un intento más de desviar la atención porque la Cuenca Mediterránea andaluza está en situación de alto riesgo de sequía, y es posible que tengan que activar severas restricciones después de un verano que han dejado pasar confiando en que en algún momento lloviera y les sacara del problema”, ha dicho.
Para el subdelegado, “el problema es que no hay actuaciones importantes ni intervenciones contra la sequía de la Junta de Andalucía en la provincia de Málaga”.
También ha dicho que “ocultan que la solución de la desaladora no estará activa hasta dentro de cinco años, y que hoy no existen esas desaladoras porque fue el PP el que decidió suspender en 2012 el plan de actuaciones que el Gobierno de Zapatero tenía en marcha”.
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